Un año después de darse a la fuga, Carlos Navarro sigue en paradero desconocido. El Yoyas se enfrenta a una orden de busca y captura tras negarse a ingresar en prisión de forma voluntaria para cumplir una pena de cinco años y ocho meses de prisión por un delito de maltrato continuado y cuatro delitos de lesiones en el ámbito familiar, amenazas y vejaciones a la madre de sus hijos, Fayna Bethencourt, quien, naturalmente, lamenta esta situación.
El malestar que golpea a la exconcursante de Gran Hermano ante la desaparición de El Yoyas es cada vez mayor. Ella misma lo ha confirmado a Semana, lamentando que, a su parecer, "hay poco interés por encontrarlo, porque, si no, ya lo habrían hecho". Bethencourt insiste en que su exmarido se encuentra en la Península, pero "la situación sigue igual de estancada".
"Sigo esperando a que no se cumpla ese año. Que me llame la Policía antes y me diga: 'Bueno, Fayna, ya está, ya lo tenemos'. No tiene pinta de que vaya a ser así, sinceramente. Cuando se cumpla el año de la desaparición, volveré a hacer ruido porque si no soy yo la que sale la palestra y sigue denunciando la situación en la que me encuentro, no va a salir nadie. El tiempo va pasando y esta persona, por llamarla de alguna manera, sigue desaparecida. Quién dice que algún día no coja un avión y se plante aquí en Gran Canaria. Creo que hay poco interés por encontrarlo, porque, si no, ya lo habrían encontrado", ha expresado.
Bethencourt está muy decepcionada con las últimas entrevistas que Navarro está ofrenciendo, pues desde la prensa se está dando voz a "un fugitivo condenado por violencia de género". "A mí lo que me ha salvado es la distancia geográfica, pero no significa que me vaya a salvar el pellejo eternamente estar a miles de kilómetros de esta persona", ha añadido.
El antiguo rostro de Mediaset asegura que, pese a todo, no tiene "miedo". "No vivo con un miedo constante ni permanente porque me volvería loca. Es difícil de describir. Es como llevar una especie de peso a cuestas que no me permite cerrar página. Para mí ese capítulo sigue abierto por mucho que yo continúe con mi vida y con mis proyectos. Como si tuviera una bola de metal atada al pie. Y hasta que no se haga justicia, hasta que no lo atrapen, no voy a poder continuar hacia delante libre del todo. Es como un buitre, ahí, sobrevolándome".
Muchas preguntas asaltan continuamente su cabeza. "¿Y si le da el mes que viene le da por volver a salir en los medios y decir que es inocente, que yo soy la mala? A mí eso me afecta y afecta a mi familia, a la gente que me quiere. Me sigue maltratando psicológicamente en la distancia a través de los medios y delante del país entero", ha contado.
Estas declaraciones llegan después de reaccionar a la última entrevista de El Yoyas, que solicitó al nuevo Gobierno de Pedro Sánchez "el indulto o la amnistía", además de "condonar" sus deudas con Hacienda. "Carlos Navarro Merino está en busca y captura y, si tiene que pedir algo, que lo haga desde la cárcel", ha expresado Bethencourt en En boca de todos", dijo Bethencourt, muy cabreada. Y añadió: "Se está riendo de mí, de la Justicia, de la jueza y hasta del mismísimo Presidente. Yo llevo un año denunciando esta situación y haciéndola pública, lo que no puede ser es que algunos medios de comunicación se presten a darle voz".