La periodista era de las pocas expertas 'cuore' que no se habían manifestado hasta el momento sobre la traición de Ángel Cristo Jr. a su madre, Bárbara Rey. Siendo ella una entendida del tema, llamaba la atención. Este jueves ha roto su silencio para confesar que el tema no le ha pillado por sorpresa: "Él me llamaba diciéndome que quería hablar de su familia en televisión y yo le frené".
Lydia Lozano, que ha sido la primera invitada del podcast Drama Queen, ha desvelado que lograba calmar a Ángel Cristo tras "horas al teléfono": "Yo le decía que él no podía hablar porque si se sentaba enfrente de mí, yo le podía destrozar la vida porque no tenía el culito limpio. Ha estado muchas veces en el calabozo". La tertuliana confirma que la única motivación de Ángel para traicionar a su madre y su hermana ha sido el dinero: "Hace dos o tres semanas estaba en Marbella con ellas. Seguramente, la novia que tiene le ha instigado a hacerlo. Han sido 120.000 euros". Y ha añadido: "No es un montaje, como se ha dicho. Él lo tenía pensado desde hace mucho tiempo".
"Llegué a pedir mi despido"
Pero no solo de Bárbara Rey y Ángel Cristo Jr. ha hablado este jueves Lydia Lozano. La periodista, que ha fichado por Mañaneros (TVE) tras el cierre de Sálvame, ha recordado cómo fueron las últimas semanas en la cadena de Fuencarral: "Pensé en abandonar a la productora y renunciar al documental de Netflix. Pero cuando te cortan la cabeza, el torso y las piernas en Telecinco, dices '¿Cómo me voy a perder esta oportunidad?", ha reflexionado.
Para Lydia Lozano, "la experiencia de Netflix ha sido el regalo de muchos años" y le ha permitido reencontrarse con Kiko Matamoros, Hernández y María Patiño, con los que su relación se deterioró durante los últimos años de Sálvame: "Volví a tener el buen rollo que tenía con ellos. La que más me fascinó fue María. Antes, no tenía la confianza de contarle una pena mía. Creo que con este viaje ha podido conocerme más que yo a ella".
"Charly es mi refugio"
La tertuliana también ha hablado de su marido, el eje de su vida: "Es mi refugio, la libertad. Yo ante todo quiero libertad, hacer lo que me da la gana sin hacer daño a nadie y menos a Charly. Ojo, la libertad no implica poner los cuernos. No se los he puesto nunca y no creo que lo haga".
Eso sí, confiesa que Charly no ha sido el único hombre de su vida: "He estado con dos hombres muy famosos. Uno sigue vivo y el otro no. El que está muerto era la pera en todos los sitios", ha desvelado entre risas.