Luis Miguel y su hija Michelle Salas fueron fotografiados recientemente con Paloma Cuevas en Las Vegas (EE UU). Una velada a la que también acudió Alejandro, uno de los hermanos del artista, con quien mantiene un gran vículo. Sin embargo, a quién no se vio fue a Sergio Basteri, el hermano pequeño del cantante.
Todos ellos disfrutaron de un exquisito restaurante en la ciudad condal de Nevada en compañía de sus seres queridos, tal y como muestran las imágenes. Una cena cargada de lujos con platos deliciosos como el tartar de wagyu o una diversidad de mariscos. Todo ello acompañado de un ambiente musical relajado en un local único. Asimismo, los comensales no solo estuvieron atentos a la comida, pues también captó su atención un discurso de Luis Miguel.
Aunque es una incógnita el tema de conversión, las imágenes reflejan la complicidad y unión de la que disfrutaron Luis Miguel, Paloma Cuevas, Michelle Salas y Alejandro. Unas instántaneas donde se aprecia a cada uno de ellos dispuestos en una mesa redonda, con risas de por medio y con el sol de México como protagonista del momento; así lo refleja el reportaje captado por la revista mexicana Caras. Y es que después de tantos años alejados, la familia disfruta de la unión tan férrea que han consolidado.
Luis Miguel, más unido que nunca a su hija Michelle
Unión que tuvo su nexo en la boda de Michelle y Danilo Díaz el pasado mes de octubre. De hecho, la hija del cantante disfruta de la gran relación que goza con la pareja de su padre -ya vimos el abrazo en el que se fundieron en la ceremonia-, cuya relación no solo ha mejorado la imagen pública del artista, sino también el interior del cantante, que se muestra más alegre y relajado. Incluso, esto fue percibido por sus fans en su última actuación en Chile, donde rompió a llorar y mostró su lado más vulnerable por la ovación y el agradecimiento recibido.
Eso sí, entre tanto concierto y tiempo para la familia, también ha tenido que sacar un hueco para lidiar con la polémica generada en torno a su posible madre biológica. Y es que, recordemos que Marcela Basteri desapareció en 1986. Sin embargo, hace unos meses se encontró a una mujer con un parecido idéntico al del artista en Argentina; motivo por el cual se lanzaron a realizar unas pruebas de ADN para descubir si existía un vínculo biológico, pero que terminó con resultados poco convincentes.