Una mujer muy famosa de nuestro país intentó contratar hace años al conocido karateca español Felipe Hita para que le diese una paliza a Alessandro Lequio. Una información que ha desvelado el propio deportista, que fue campeón de Europa, en una entrevista concedida este fin de semana. El propio conde italiano ya se ha pronunciado al respecto.
"Me lo creo perfectamente, pero no quiero saber quién fue porque sería remover un pasado muy profundo y muy oscuro porque he cosechado diversas simpatías a lo largo de mi vida", ha dicho entre ligeras risas el ex de Ana Obregón y Antonia Dell'Atte en Telecinco. "Me han pasado cosas infinitamente peores que esta", ha recordado también. Al mismo tiempo, ha dejado caer que no piensa mover ni un dedo por descubrir el nombre de la famosa en cuestión. El pasado, es pasado.
Según ha contado el sobrino nieto del rey Juan Carlos, conoció a Felipe Hita hace muchísimos años porque él también competía en la Selección Italiana de Kárate. Tanto es así que participaron en varias exhibiciones juntos. No obstante, no sabía que una famosa le había ofrecido dinero para darle una 'lección' en forma de golpes. El deportista, por su parte, no aclaró si esta mujer es una de sus ex, entre quienes se encuentran Silvia Tinao, Sonia Moldes, Mar Flores o Eugenia Martínez de Irujo, además de las madres de sus hijos.
La confesión de Fernando Hita
"Fui portero de discoteca, me metí a hacer desahucios de sitios ocupados. También me ofrecieron hacer cobros de pellas de juego, pero no quise. Ocurrió incluso que una famosa me quiso contratar para pegar a Alessandro Lequio", desveló el deportista de 65 años este fin de semana en El Mundo.
Sobre su exitosa trayectoria deportiva, Hita también recordó: "Quedé campeón de Madrid y campeón de España Junior. Finalmente, quedé campeón de Europa en León, en 1978. Gané el peso medio. Cuando volví al barrio todos me aclamaban. ¡Me sentía Rocky, coño! Me estaba cambiando la vida gracias al kárate".
Además, Felipe habló de otros episodios mucho menos agradables de su vida: "Mi padre sirvió a Onassis, a Nixon, al Rey, a Franco. Pero también bebía y pegaba a mi madre unas palizas, que vamos... Mi madre nos sacó de casa cuando yo tenía cinco años y tuvimos que volver, finalmente. A ella casi la meten en la cárcel por abandono de hogar. Manda cojones".