El bailaor flamenco duerme desde este viernes en la cárcel. Ha ingresado en la prisión de Soto del Real tras ausentarse en repetidas ocasiones de la cita que le obliga a firmar en los juzgados a la espera del juicio por un supuesto delito de tráfico de drogas. El juez ha decretado "riesgo de fuga" y Rafael Amargo está devastado: "No se lo esperaba".
Su abogado ya trabaja en un recurso de súplica, que deben presentar en un plazo de tres días. Alegan que está "en tratamiento psiquiátrico" y sufre "ataques de pánico", motivos por los que se ausentó de dichas citas. "Una persona enferma lo va a pasar muy mal en la cárcel", ha dicho la abogada Bárbara Royo en YAS. "Es un señor enfermo que no tiene dinero y no va a huir del territorio nacional. Si no ha cumplido las comparecencias por motivos de salud, el pánico, se puede acreditar en un recurso de súplica".
A las tres en punto de la tarde entraba en prisión desde la Audiencia Provincia. Primero le han fichado, lo han cacheado de manera rigurosa y lo han trasladado a un módulo de preventivos. Ha recibido ropa, también de hogar y un kit higiénico. El sábado tendrá que salir de la celda para desayunar acompañado del resto de reclusos. Después tendrá una entrevista con el psicólogo, mediador, médico y el educador de la cárcel de Soto del Real.
Amargo se enfrenta a nueve años de prisión tras ser acusado de vender droga en su casa de Madrid. Él se declara inocente asegurando que eran "para consumo propio".
