El hijo de Rodolfo Sancho continúa en prisión preventiva en la cárcel de Koh Samui a la espera de que se celebre el juicio por el presunto asesinato del cirujano colombiano Edwin Arrieta. Este lunes, han visto la luz unas imágenes inéditas del chef español dos días antes del trágico suceso que sitúan a Daniel como espectador en un combate de Muay Thai.
En ellas, el nieto de Sancho Gracia, que practica el boxeo tailandés desde hace años, está sentado en las gradas como uno más. Con una camiseta blanca y el pelo suelto, graba con su teléfono móvil cada detalle del combate. Antes de que finalice el encuentro, Daniel busca a alguien entre el público y en un momento determinado, coge su mochila y abandona el local.
Las imágenes, emitidas en TardeAR, fueron tomadas el 31 de julio, dos días antes de la muerte de Arrieta, y son clave para la defensa de Daniel. Con ellas pretenden demostrar que la versión que dio a la policía sobre el motivo de su viaje a Tailandia es real: quería aprender más sobre el Muay Thai, deporte que practicaba en España desde hacía años. Argumentan así que no viajó con el fin de matar a Edwin y que, por tanto, el asesinato del mismo no fue premeditado, sino accidental.
Habla la fiscalía tailandesa
La Fiscalía presentaba cargos el pasado jueves en la Corte de Koh Samui pero la vista fue suspendida por la petición de Daniel de contar con un traductor de español en la sala: "Me siento indefenso", dijo. Será el próximo 13 de noviembre cuando se repita el acto y el juez feche el inicio del proceso judicial. La figura de este traductor se ha convertido en un elemento clave para la defensa de Daniel, pues sus letrados afirman que su ausencia hasta el momento podría invalidar toda la investigación y documentación previas: la supuesta confesión de Daniel y la reconstrucción del crimen.
La fiscalía, sin embargo, ya ha respondido a este supuesto: "Él aceptó un traductor en inglés y la justicia no está obligada a traducir todos los documentos". Y han añadido: "La ley tailandesa está obligada a proveer un traductor en el idioma que exija el encausado, pero en Tailandia y su justicia no están obligados expresamente a traducir todos los documentos porque el idioma oficial es el tailandés".
No parece que esta vía de defensa vaya a prosperar. La fiscalía ha sido tajante: "Hay dos confesiones claras y directas del propio Daniel Sancho, un testigo que lo vio con bolsas sobre un kayak... No existe causa exacta de la muerte, tampoco existe una sola magulladura de golpes compatibles con la muerte o una pelea y sí existe el desmembramiento del cuerpo con los mismos cuchillos que compró Daniel Sancho".
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