Los últimos años de Fernando Fernández Tapias han estado marcados por sus problemas de salud, relacionados principalmente con sus deficiencias coronarias. El empresario, que ha muerto este miércoles 25 de octubre a los 84 años, ha estado arropado hasta el final de sus días por Nuria González (51) y por sus dos hijos con la socialité, Iván que ya tiene 20 años, y Alma, una adolescente de 16 que hoy llora la pérdida de su progenitor.
No tan unido estaba al resto de sus hijos. Fernando, Borja e Íñigo, los tres fruto de su primer matrimonio con Chiqui Riva de Luna, le demandaron en 2021 para incapacitarle legalmente e impugnar así el trasvase de poderes que había iniciado meses antes en su conglomerado empresarial. Sandra y Juan Carlos, por su parte, nacieron de sus segundas nupcias con Juana García Courel. Se dice que el divorcio con García-Courel fue uno de los más caros de la historia de España: sumaba 12 millones de euros y varias propiedades inmobiliarias. Derivó en una cuantiosa pensión mensual para la exesposa.
Si hay algo de lo que nunca se pudo recuperar fue de la triste pérdida de su hijo Bosco, que desapareció en 2010 a los 40 años y era hijo de su primer matrimonio. Su cuerpo no fue encontrado hasta dos años después. Fue en 2012 cuando un buzo de la Guardia Civil extrajo del fondo de la cueva de Playa Chica (Lanzarote) los restos del cadáver. Muy unido a su vástago, Fernández-Tapias nunca llegó a superar la pérdida del joven, con el que tenía una relación muy especial.
Fundador de las empresas navales Amura S.A. y Roda S.A., de Fernández-Tapias S.A., de Conservas Peña S.A. y Conservas Portonovo S.A., de la sección marítima de Bureau Veritas SAF o de Viajes Sandra's S.A. entre otras compañías, Fernández Tapias también destacó como presidente de la Confederación Empresarial de Madrid-CEOE entre 1985 y 2002.
Nuria González y sus hijos pequeños
En abril de este año, González acudió a La Maestranza junto a sus dos hijos para disfrutar de la tarde de toros que se celebró en el coso sevillano por Domingo de Resurrección. Iván estudia en el prestigioso Colegio Universitario de Estudios Financieros de Madrid (CUNEF), el mismo centro por el que han pasado Alonso Aznar y los hermanos Carlos y Felipe Cortina. Alma, la pequeña de Fernández-Tapias, está centrada en su etapa escolar. Al igual que su hermano, es una joven muy aplicada.
Nuria González, por su parte, no se ha separado de su marido durante sus problemas de salud. Los problemas han sido constantes y han estado relacionados principalmente con deficiencias coronarias. El empresario llevaba implantados más de media docena de stents (endoprótesis vasculares). También sufrió neumonías y otros percances por los que fue hospitalizado en varias ocasiones durante los últimos años.
Fernando y Nuria se casaron el 14 de octubre de 2002 en un enlace celebrado en Jerez de la Frontera con invitados como Isabel Preysler, Terelu Campos, Cari Lapique, Marisa de Borbón y la duquesa de Montoro, íntimas de Nuria. A pesar de los invitados de excepción que asistieron al enlace, la ceremonia se celebró en secreto de cara a la prensa.
Antes de afianzar su relación con el empresario, Nuria González fue relaciones públicas de un bar - discoteca situado por la zona de Santa Engracia en Madrid. Allí compartió trabajo y confidencias con la mujer de la leyenda blanca Raúl González, Mamen Sanz. También trabajaron juntas en una importante agencia de modelos, lo que les permitió conocer también a personalidades destacadas del panorama social.
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