El 22 de abril, este digital desveló en primicia la bomba: Tita Cervera vetaba la biografía escrita por Nieves Herrero. Ella misma se la había encargado y las páginas de la obra estaban en poder de la baronesa, esperando su aprobación y listas para ser publicadas. Entonces, publicamos esta noticia: "Tita Thyssen ha paralizado, vetado, o abortado la salida a la venta prevista para estos días", decíamos.
Hasta ese día, nadie sabía lo que se venía encima y la propia Nieves herrero comentaba en privado que todo iba bien y que sencillamente Carmen Cervera tenia las páginas para leerlas y aprobarlas. Pero insistía en que no pasaba nada. No era cierto. Luego llegaron las comparecencias de Tita en Espejo Público, donde dijo que ella misma iba a escribirla y después las entrevistas de Nieves Herrero, que tuvo que reconocer lo que adelantábamos desde Informalia nada menos que el 22 de abril.
A Tita no le parecía mal que Nieves Herrero escribiera un libro de su vida. De hecho fue Carmen Cervera la que un día le planteó a la periodista que escribiera su biografía. Nieves recogió la propuesta y se la contó a su editorial. Quedaron muchas veces durante casi tres años, hablaron, Tita le contó la historia de su vida a su manera y cuando todo estaba prácticamente preparado para imprimir, Tita se echó atrás y decidió que esos años de trabajo de Nieves Herrero se iban a la basura.
La baronesa dejó de estar interesada en el proyecto de la chica Hermida y se cerró en banda. Tanto es así que, a pesar de los intentos de la periodista por contactar con ella, nunca obtuvo respuesta. Nieves, al principio, se agobió un poco, pero nunca se le pasó por su cabeza el desenlace. Jamás pensó que Tita la dejaría tirada con el libro escrito y la última revisión en su casa. Y cuando quiso darse cuenta ya era tarde, como adelantamos en exclusiva hace meses, mucho antes de todo lo que luego se ha ido diciendo.
Entonces la propia Nieves lo negó, insistió en que lo que habíamos publicado no se ajustaba a la realidad. Tal vez ella no conocía al 100% la realidad (o no había querido darse cuenta). Tita ya no contestaba a sus mensajes, no devolvía sus llamadas y, lo que es peor, no tenía intención de hacerlo.
El detonante fue una disputa con su hijo Borja tras su entrevista con Risto Mejide, como ya contamos también en Informalia. Una de las gordas. En ella, la baronesa dejó que le preguntaran por la paternidad de sus mellizas y la pregunta fue clara: "Se dice que son hijas de tu hijo Borja". Una bomba que Tita paralizó una vez que habían salido ya las promos del programa con esa pregunta. Una situación que su hijo no olvida.
Borja no ha entendido que tras años de tregua con su madre y alejado de los medios por voluntad propia, sea justamente ella quien haya vuelto a abrir la veda. Y puede que pagara los platos rotos con Nieves. Al menos eso dicen algunas personas cercanas a ella. El momento también coincidió con el tema de la gestación subrogada de Ana Obregón. Eso también tuvo mucho que ver en el asunto, como ya se lo adelantamos también en exclusiva. Tal vez la relación de la bióloga y la baronesa en lo referente al nacimiento de la pequeña Ana Sandra Lequio tenga más miga de lo que se ha dicho. Tanta, que la publicación de la polémica maternidad de la presentadora dejó temblando a Tita y con pocas ganas de comparecer públicamente.
Tita no ha leído ni una línea del libro de Nieves Herrero
Lo que no sabe (o dijo no saber) Nieves Herrero es que tras estos dos episodios, Tita decidió no querer saber nada más del asunto del libro, ni de ella. Quiso retirarse y esconderse. De ahí que cuando recibió las galeradas de lo que sería su biografía pasó olímpicamente de ellas. "No ha leído ni una línea del libro que le presentó terminado Nieves Herrero. Le ha interesado cero. Lo único que hizo cuando las recibió fue mandarlas a sus abogados para que las leyeran por ella. En principio no tiene intención de demandar, pero ha dado instrucciones a sus abogados para que lo hagan si hay algo demasiado excesivo", nos dice una persona que está muy cerca de ella.
La periodista se ha llevado el disgusto de su vida mientras Tita disfruta de sus vacaciones, un año más, alejada de una de las personas que más quiere en su vida, su hijo Borja. Quizás también tuvo algo que ver que en las páginas se abordara aunque con elegancia el mismo tema de la paternidad de sus mellizas. Ella misma le dijo a Risto antes de que censuraran la promo: "Mis hijas tienen un padre", aunque luego se arrepintiera. Y es que Nieves también aborda el tema en su libro, aunque de un modo sutil: Según ella, Tita le dijo a su hijo Borja: "Hijo, nuestra familia es muy pequeña, tienes la responsabilidad de dar continuidad a nuestro apellido". La posibilidad de volver a dañar la relación con su hijo hizo que se echara para atrás a la hora de autorizar la biografía firmada por Nieves Herrero.
Tita lo justificó así. "En esa biografía no me reconocía. No me gustaban esos diálogos que nos atribuye a Heini (Thyssen) y a mí, ni en los que figura que yo hablo con Lex (Barker, su primer marido). No me reconozco ni les reconozco a ellos", afirmó. Pero ni siquiera había leído una línea de lo que le enviaron.
Nieves Herrero arranca el relato en 1994, "con el secuestro del barón Thyssen tras sufrir un ictus, cuando sus hijos querían trasladarle a un hospital psiquiátrico y Tita contrató un avión medicalizado y se lo trajo a España", explicó la escritora. "No era esa la forma de empezar y hay datos equivocados. El libro no contaba ni cuándo nací yo, lo que me presentó no me gustaba. Esto no va así, le dije", desveló Tita. Pero este principio se lo habían contado.