Carmen Sevilla será incinerada este miércoles 28 de junio en la más estricta intimidad, como así ha deseado su único hijo, Augusto Algueró, que no se ha separado de ella en los últimos días. Desde 2015, la leyenda de la cultura española, que murió este martes a los 92 años, permanecía interna en una residencia geriátrica, de la que salió el pasado domingo para ser trasladada a la Fundación Jiménez Díaz, en Madrid, por un empeoramiento en su salud. Desde 2009 sufría Alzheimer.
Al contrario que otras folclóricas y eternas figuras de la cultura española como Rocío Jurado, Lola Flores, Sara Montiel o Verónica Forqué, fallecida en diciembre de 2021, la que fuera presentadora de Cine de Barrio no tendrá un velatorio público para que sus amigos puedan despedirla ni una capilla ardiente abierta para todo el que quisiera acercarse. Tal y como ha contado Telemadrid, la cantante y actriz se va sin homenajes públicos, aunque sí con el cariño y el reconocimiento de todo un país que ha crecido con ella y se ha divertido con su característica sonrisa y espontaneidad.
Así las cosas, en la tarde este miércoles será incinerada en la más estricta intimidad en el tanatorio de Pozuelo de Alarcón, donde han sido trasladados sus restos mortales. De esta forma, se marcha físicamente de este mundo como ha vivido los últimos años, completamente alejada del foco mediático.
Carmen demostró desde casi desde niña contar con grandes dotes para el espectáculo. Con tan solo 17 años debutó en el cine amadrinada nada menos que por Estrellita Castro. Era tan joven que en sus comienzos, tuvo que engañar sobre su edad, porque era menor de edad.
Vivió sus últimos años apartada de todo y de todos, ensimismada en ese mundo impenetrable y cruel de la pérdida de memoria. Muy pocas personas conocían todo sobre ella: su hijo Augusto J. Algueró y su amigo del alma, Moncho Ferrer, veterano relaciones públicas del mundo de la música. Los dos la han acompañado hasta su lecho de muerte. Llevaba tiempo prácticamente aislada en su residencia sin recibir visitas, como pidió su único hijo.
En 2010 decidió retirarse debido a que cada vez eran más numerosos los despistes que tenía, siendo sustituida en Cine de Barrio por su amiga Concha Velasco, que a sus 83 años sufre actualmente los achaques de la edad en una residencia a las afueras de Madrid.
