Tremenda situación la que se vivió este fin de semana en Torrelodones, a las puertas de la casa que fue de Camilo Sesto y que ahora ocupa su único hijo, Camilín. Las malas decisiones le han llevado a una espiral autodestructiva de la que su madre, Lourdes Ornelas, trata de sacarlo por todos los medios y la última ocasión casi le cuesta la integridad física.
Ornelas, preocupada por su hijo, con el que llevaba varios días sin poder contactar, se desplazó hasta el domicilio y descubrió que Camilín estaba acompañado por personas poco recomendables. Ella trató de echarlos: "Iros de aquí, no os quiero ver aquí". Desde la calle se escucharon los gritos de su hijo: "Lárgate, déjame en paz. Fuera de mi casa", vociferó, fuera de sí.
Las cámaras de Telecinco captaron el desencuentro y Lourdes, de nuevo en la calle, contó lo ocurrido: "Ha soltado a los perros y me han mordido aquí, en el trasero, pero estoy bien", decía alterada. "Él se pone así pero luego me lo agradece, me pide perdón y me agradece que eche a la gente mala de casa".
Los reporteros, testigos del angustioso momento, han dado más detalles sobre la actual situación de Camilín, que se está hormonando para cambiar de sexo con medicamentos del mercado negro: "Nos invitó a entrar en su casa, estaba muy desordenada y nos dijo que la iba a limpiar. Se notaba que llevaba días sin dormir, sin asearse y aunque queríamos mantener una conversación con él, no pudimos. Camilo no podía hilar una palabra con otra", han dicho.
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