La decisión de la jueza de la Audiencia de Barcelona de mantener al ex futbolista en prisión preventiva ha caído como un jarro de agua fría sobre Dani Alves. Su abogado, Cristóbal Martell, le ha comunicado la mala noticia a primera hora de este martes y la reacción del acusado ha sido la de un hombre completamente derrotado: no ha querido salir de su celda en todo el día.
Alves, que lleva un mes en la cárcel acusado de un delito de violación, se ha refugiado en su habitáculo completamente solo y en silencio. Según Cuatro al día, el brasileño no ha dicho ni una palabra en todo el día ni tampoco ha comido, pues no se ha personado en el comedor común a la hora del almuerzo. Algunos compañeros han tratado de animarlo sin éxito y le han contado que otros presos habían hecho una porra, apostando por si saldría este martes de prisión o no, algo que ha molestado mucho a Alves.
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No cabe recurso contra la resolución de la Audiencia de mantener a Dani Alves en prisión preventiva. Sin embargo, en el futuro la defensa del ex barcelonista acusado de agresión sexual podrá pedir de nuevo la libertad de su cliente. El plazo máximo establecido por ley en el que Dani Alves puede permanecer en prisión preventiva es de dos años, prorrogables a otros dos, es decir, el futbolista podría llegar a estar hasta cuatro años encarcelado y sin juicio.
La defensa del brasileño, encabezada por Martell, ha afirmado vía comunicado que "sigue siendo tan inocente como lo era antes del dictado de la resolución" y ha negado el riesgo de fuga en el que inciden Fiscalía y acusación: "Su voluntad de abandonar España y eludir el proceso era y es inexistente".