Rafa Nadal ha caído este miércoles en el Open de Australia tras experimental nuevas molestias en su enfrentamiento contra Mackenzie McDonald. El mallorquín, de 36 años, ha abandonado la pista cabizbajo mientras su esposa, Mery Perelló, rompía a llorar en las gradas.
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La empresaria era la viva imagen de la tristeza. Ella sabe mejor que nadie los esfuerzos y sacrificios de Rafa para estar en Australia, donde ha caído segunda ronda tras agravarse su lesión en la parte superior de la pierna izquierda. Los gestos de dolor de Nadal han dejado destrozados no solo a su mujer, sino al resto de la familia que le acompañaba: su hermana y sus padres.
Mery Perelló, mujer de @RafaelNadal, no pudo evitar las lágrimas al ver sufrir al balear tras su lesión ????#AusOpen pic.twitter.com/tQgEtTugZn
— Eurosport.es (@Eurosport_ES) January 18, 2023
Viajaron a Melbourne hace dos días y lo hicieron, por primera vez, con el pequeño Rafa. El primogénito de Nadal y Mery Perelló se ha estrenado como fan número uno de su papá, que se mostró encantado: "Estoy agradecido de tener la oportunidad de que estén aquí conmigo en Australia. Ayuda mucho. En esta etapa de mi carrera imaginarme meses fuera de casa siendo padre sería una situación difícil". El bebé será, seguro, el mejor consuelo para Rafa en este momento complicado: "Es una de las cosas más bonitas de la vida, sin ninguna duda, así que estoy súper feliz", dijo hace unas horas en rueda de prensa.
Nadal blessé, son épouse Xisca en larmes ????#AusOpen #HomeOfTennispic.twitter.com/LRPe5A26Y2
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