La marquesa de Griñón se ha convertido en una de las protagonistas del día por su reconciliación con Iñigo Onieva. Tamara Falcó, que dejó a su prometido tres días después de darle el "sí, quiero" al descubrir que le había sido infiel, ha sucumbido a la reconquista del ingeniero: "Es verdad, hemos vuelto".
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Lo ha confirmado en Diez Minutos, donde asegura también que está convencida de su decisión y que la ha tomado pensando solo en ambos. Onieva siempre se mostró arrepentido de haber traicionado la confianza y el amor de su chica y comentó a su círculo que no pararía hasta recuperarla. "Ha sido un milagro navideño", ha dicho él.
Tamara le dio el portazo tres días después de filtrarse el vídeo en el que Onieva besaba a una chica en un festival de música en Nevada. Los hechos habían ocurrido apenas dos meses antes, pero él los negó afirmando que eran imágenes de años atrás. Finalmente entonó el 'mea culpa' y ella, herida, se fue a casa de su madre. Sin embargo, casi dos meses después, Onieva y Tamara se reunieron para hablar de lo sucedido, un encuentro que se alargó hasta altas horas de la madrugada y en el que se sembraron las primeras semillas del perdón.
Desde entonces, Onieva ha estado concentrado en demostrarle a Tamara que puede ser el hombre que ella necesita, y tras hacer el Camino de Santiago para expiar sus pecados, la acompañó a la Misa del Gallo en Nochebuena. El pasado día 31, fue invitado a Villa Meona tras las uvas. Ahora, la pareja se da una segunda oportunidad y lo hacen tan convencidos que su círculo afirma que la boda sigue en pie y que veremos a Tamy vestida de blanco el próximo verano. Veremos si lo aprueba Isabel Preysler, que todavía no ha perdonado la traición de Onieva, al que no quiere ver por el momento.
