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Tamara Falcó e Íñigo Onieva, reconciliados: ella le abrió las puertas de Villa Meona en Nochevieja

"Milagro navideño", así es como define el entorno de la marquesa de Griñón y el diseñador de coches la reciente reconciliación entre los dos. Tras el perdón de Tamara Falcó a Íñigo Onieva, lo del nanosegundo en el metaverso se queda para la historia... A ver con qué declaraciones nos sorprende ahora la hija de Isabel Preysler.

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Quien adelanta la información este martes es la revista Hola, el semanario amigo de mamá Preysler e hija Tami. Ya no hay dudas. Tamara ha perdonado a Íñigo a pesar de descubrir que había besado a otra mujer en aquel famoso festival de Nevada.

La revista asegura, incluso, que el empresario estuvo durante la noche del 31 de diciembre en Villa Meona. Se presentó allí después de que sonaran las doce campanadas. Le abrieron las puertas de la mansión de par en par (aunque Isabel no fue testigo, ya que se encuentra en Miami alejada de la tormenta mediática que ha desatado su ruptura con Mario Vargas Llosa). 

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Lo cierto es que esta noticia no ha resultado del todo sorprendente, pues ya habían indicios que apuntaban a ello. A finales de noviembre mantuvieron un encuentro que se prolongó durante toda una noche y en el que pusieron sobre la mesa el nombre de Hugo Arévalo, el amigo de los dos que se convirtió en el paño de lágrimas de Tamara. En Nochebuena, además, Tamara e Íñigo acudieron juntos a la Misa del Gallo en la Parroquia Bautismo del Señor.

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