La misa funeral organizada este martes en Sevilla por Junko en memoria de Bernardo Pantoja, a la que no asistió ningún miembro de la familia Pantoja, ha tenido un claro protagonista: el presunto hijo ilegítimo del fallecido. Se llama Luis aunque es más conocido como Pinocho y retó a Anabel a la salida del homenaje: "El último adiós a mi padre. El tema va para adelante, está en manos de los abogados porque la verdad solo tiene un camino".
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Pinocho ha emprendido medidas legales para ser reconocido legalmente como hijo de Bernardo. Asegura que el hermano de la tonadillera se lo contó hace tiempo y que él mismo le insistía para que le llamase "papá". Ahora, está dispuesto a cumplir sus últimos deseos: "No voy por el tema económico ni mucho menos. Voy por la verdad y si ese apellido me pertenece, me pertenece y punto", ha asegurado.
Pinocho, que dice tener dos pruebas de paternidad en su poder, se mostró muy duro con Anabel, con la que no tiene relación ni quiere tenerla: "Hoy hemos estado aquí los que en su día no pudimos despedirnos. Hemos estado los que verdaderamente en estos años hemos estado con él. Y lo que pasó en el tanatorio fue un circo y no fui por lo mismo, por no participar de ese circo", ha añadido. Aprovechó también para manifestar su total apoyo a Junko, la viuda de Bernardo: "Siempre ha estado a mi lado, siempre me ha facilitado ver a mi padre y tiene todo mi apoyo".