El futbolista del Barça ha sido el absoluto protagonista de la prensa nacional e internacional en el mes de junio (con permiso de Shakira). Su ruptura con la colombiana ha hecho correr ríos de tinta y aunque los rumores que le relacionan con una joven azafata de 22 años toman cada vez más fuerza, no todas las informaciones que se han dado estos días de Gerard Piqué son ciertas.
En la era de las fake-news, Piqué ha sido el objetivo perfecto de los que lanzan la bomba y esconden la mano. La primera, su supuesta relación con la madre de su compañero Gavi, una mujer casada y madre de familia que jamás ha salido en los medios. La noticia la soltó el periodista Melih Esat a través de sus redes sociales, sin más pruebas que su palabra y una fotografía en la que confundía a la madre con su hija, Aurora. El disparate fue tal que en los vestuarios del Barça decidieron dejarlo correr y no dar más pábulo a la mentira.
Después llegó C.C, una guapa catalana a la que relacionaron con el ex de Shakira. Después de tres días hablando de ella en televisión, la propia joven desmintió haber tenido relación alguna con Piqué: "No lo conozco, así que pido que por favor me dejen en paz. La gente me está acribillando por una cosa que no he hecho, cualquier cosa que salga con mi nombre será respondido con una demanda".
La que también desmintió haberse corrido una juerga con Piqué en una conocida discoteca de Salou fue Fani, ex de La isla de las tentaciones, conocida por su tendencia a la fiesta y sus infidelidades a Christofer, con el que se casó hace apenas una semana. "Yo no estuve en esa fiesta. Que me enseñen una foto o un papel que lo demuestre", dijo enfadada. "Es que ya estoy harta. No he estado en fiestas de Piqué ni de ningún otro futbolista".
Pero no todas las fake-news que se han publicado estos días sobre Piqué tienen que ver con su vida privada. Los diarios deportivos aseguraron que Xavi Hernández, entrenador del Barça, le había dado un toque al jugador por las repercusiones que tenían sus escándalos personales en el club y un tirón de orejas por su alocada vida de soltero. Muchos sitúan a Piqué más fuera que dentro del equipo para la próxima temporada, mientras que otros afirman que el técnico sigue contando con su defensa al que, eso sí, le habría pedido pleno rendimiento para recuperarse de su lesión en el aductor.
En redes se ha podido leer de todo en este sentido: que Piqué dejaría el Barça para trasladarse a Miami, donde Shakira quiere instalarse; que colgaría las botas para entrar en política o incluso que podría hacerse policía, un cuerpo donde tiene tantos o más amigos que en los campos de fútbol.
Verdades como puños
Lo que sí es cierto es que Piqué tiene una de las nóminas más altas del F.C Barcelona y que la falta de liquidez del club en la actualidad podría obligarle a rebajarla por segunda vez en dos años (ya lo hizo en 2020). También que el club tiene una deuda con su jugador de más de 30 millones en retrasos, una baza que, según los expertos, Piqué podría utilizar para situarse, en un futuro, en la directiva del club a modo de inversión, pues no parece que vayan a amortizarla en un plazo corto de tiempo.
Lo que también es incuestionable es que Piqué se ha divertido mucho estos meses, que ha celebrado tremendas fiestas en su piso de soltero en el centro de Barcelona, pero ahora está ilusionado. La afortunada es rubia, tiene 22 años, es estudiante y azafata de eventos. Trabajaba también como camarera, pero dejó su puesto cuando los periodistas empezaron a acercarse a ella. Quieren proteger su anonimato por el bien de la relación, por lo que sus últimas citas han tenido lugar fuera de Barcelona y hay testigos.
Por último, Shakira. Es cierto que contrató detectives para seguir a su marido y también es cierto que ella no quería separarse. La cantante colombiana lo está pasando mal y aunque hace de tripas corazón por el bien de sus hijos, Milan y Sasha, prefiere no ver a Piqué ni tampoco a su familia política. Por eso, ni acudirá a la boda de Marc a finales de mes ni compartirá piscina en casa con sus suegros, pues ha ordenado que levanten muros en el interior de su mansión para separar las estancias que ocupa ella de las que ocupan los padres de Piqué.