Bodas, bautizos y comuniones tienen un mal común: la temida resaca. Con estos trucos, sus efectos podrán reducirse. La temporada de BBC comienza como cada año en el mes de mayo, haciendo que se aglutinen la mayoría de las celebraciones familiares y, con ella, comienzan los excesos y unos hábitos alimenticios poco saludables.
Las comidas copiosas y un consumo alto de alcohol son los principales quebraderos de cabeza durante esta época, con lo que es importante saber cómo combatir sus efectos para poder continuar el resto de la semana de la mejor manera. Tanto la resaca post-alcohol como la pesadez que se produce después de una comida copiosa, dejan el cuerpo en reposo, ya que el flujo de sangre y la energía se centran en el proceso digestivo y hace que nos sintamos más cansados y nuestro cerebro esté menos concentrado. Te damos algunos consejos exprés para superar la resaca después de una gran celebración.
- Antes de la fiesta
Mejor prevenir que curar. Éste será el mantra para superar una resaca después de una celebración. Durante el convite, es importante elegir los alimentos más completos para no distar de una comida saludable normal, y así evitar digestiones muy pesadas o una mala resaca. Alimentos proteicos y con grasas buenas como el salmón y, sobre todo, no olvidarse del acompañamiento, que siempre es un buen complemento, como las verduras y hortalizas.
- La acidez, a raya
Para evitar el clásico ardor después de una comida contundente, nada mejor que comer de forma lenta y pausada. Además, conviene evitar alimentos que puedan provocar acidez, como aquellos ricos en cafeína, el chocolate o los alimentos muy grasos, aconsejan desde Kaiku. Como barrera protectora, un vaso de leche desnatada o cambiar el café de la sobremesa por una infusión de manzanilla.
- Boost de hidratación
Beber mucha agua y complementarlo con alimentos que hidraten contrarrestarán el efecto que produce el alcohol y las comidas copiosas: la deshidratación. ¿Opciones para mejorarla? La lechuga, la sandía y las espinacas, con casi un 93% de agua, son las reinas de la hidratación, seguidas de la leche, los yogures y las manzanas, con un 85% de agua.
- Aligerar la digestión
La sensación de pesadez después de una gran comida puede aligerarse seleccionando los alimentos y siguiendo unos trucos muy sencillos: una buena postura, preferiblemente de pie o en movimiento pausado y sentado con la espalda recta y, sobre todo, tomando alimentos que ayuden a remitir la pesadez, como los lácteos sin lactosa, ligeros y muy nutritivos. Además, si se opta por probióticos, protegeremos la flora intestinal.