Desde pequeños nos llevan obligando a hacernos la cama todos los días. Un hábito que nuestras madres nos han intentado inculcar con ahínco y que, según estudios, podría ser poco saludable.
En concreto, una investigación realizado por la Universidad de Kingston desveló que si hacer la cama puede afectar a nuestra salud. Concretamente, el estudio señala que la mejor manera de acabar con los ácaros de polvo de la cama era dejarla sin hacer.
Lo ácaros son organismos microscópicos que no vemos a simple vista pero que están. De hecho, se pueden llegar a contar millones dentro de una cama y, aunque son totalmente inofensivos por las noches se alimentan de las escamas de la piel muerte (sí, escalofriante)
Y la cuestión es que los ácaros resisten mejor en ambientes cálidos y con una humedad alta, lo que hace que para ellos el momento en que estamos durmiendo sea perfecto. Por esta sencilla razón la única manera de que desaparezcan airear las sábanas y el edredón dejando todo deshecho durante el día o, al menos, unas cuantas horas.
Así que, ya sabéis, aunque mamá os regañe, si no queréis convivir a diario con millones de bichitos invisibles a nuestros ojos, se acabó lo de hacer la cama recién levantados.