Es Mirador tiene unas vistas privilegiadas del puerto de Ibiza con el Mediterráneo de fondo. En este enclave se levanta la mansión del XIX que alberga la cocina del chef Jonathan Reina Belalcazar.
Encontramos en este rincón de la isla de Ibiza el restaurante Es Mirador, dirigido por el cocinero Jonathan Reina Belalcazar, artífice de una cocina mediterránea de autor, basada en el producto local de excelencia y con influencias latina y japonesa.
Antes de entrar hasta la cocina, recorremos el bellísimo edificio del hotel Mirador de Dalt Vila Relais & Chateâux, donde se encuentra el establecimiento. Desde los balcones se contempla la zona más monumental de la isla, como las históricas murallas de Dalt Vila, del XVI, símbolo de la arquitectura renacentista y Patrimonio de la Humanidad por la Unesco. Impresionantes también las vistas sobre el puerto con el azul del Mediterráneo de fondo. El hotel, un cinco estrellas íntimo y exclusivo, ocupa la mansión señorial levantada en 1905 y que fue la antigua residencia de la familia Fajarnés.
Cenas de siete pases
¿Y qué se come en este escenario tan exclusivo? el cocinero colombiano Belalcazar, segundo en Sublimotion, de Paco Roncero, está al mando de Es Mirador desde el año pasado. Para comer, el visitante encuentra una carta informal, corta y seleccionada, con entrantes como embutidos ibéricos, croquetas melosas de jamón, corte helado de quesos con galleta de mantequilla y mermelada de tomate. Principales mediterrános, como los arroces;también, ceviche de sirvia, cordero lechal con berenjena o cochinillo a baja temperatura. De postre, el coulant de chocolate Valrhona o la mousse de avellana con bizcocho de chocolate y toffee de maracuyá.
90 euros por persona
En las cenas, la oferta varía. Menú degustación de siete pases más postres (90€por persona, sin vino). Esta la experiencia gastro: aperitivo de mantequilla de aceituna de Kalamata y colatura de anchoa, entrantes dulces y salados, como corte helado de queso ses Cabretes con gel de limón, croqueta de jamón y tomate.
Del mar, ceviche de sirvia (pez limón ibicenco) con boniato asado y maíz; vieira con tupinambo y emulsión de jalapeños, y raya frita. ¿Y de la tierra? cochinillo con crema de cebolla asada y melocotón. Como bocado dulce, royal de kalamansí (o calamondina) con financier de limón. También, pannacotta de palomitas.