¿Torrijas más sanas? ¿Es posible? Llega la Semana Santa, esta vez por adelantado, y los más golosos andan relamiéndose, pensando en este dulce tradicional de Pascua que tantas veces hemos visto freír en la cocina a nuestras abuelas. Pues bien, El horno de Babette, referente en panadería de calidad en Madrid, volverá a sorprender a sus clientes con su deliciosa propuesta de torrijas al horno.
Realizadas con un pan buenísimo, sin aditivos químicos, con masa madre y harina certificada, tienen una capa crujiente por fuera y son jugosas y dulces por dentro. Están infusionadas con leche y canela. "Te da un buen rollo increíble comerlas, porque te traen de vuelta a la infancia, y, además, no están fritas. ¡Están buenísimas!", explica Beatriz Echeverría, propietaria y panadera de este negocio que no deja de dar buenas noticias. Como esta, que les llevó meses de prueba, todo un I+D+i, hasta que dieron con unas torrijas que no tuvieran nada que envidiar a las tradicionales. Y, además, sientan mejor y son más saludables.
Eso sí, mejor encargarlas, porque vuelan. Cuestan 7,50 euros y las puedes conservar varios días en la nevera, si no te las comes de una sentada.
Si las quieren elaborar en casa, es otra opción. El principal truco que da esta experta panadera es que hay que comprar un buen pan, "capaz de sostener la infusión de leche y canela para que queden jugosas, y huir de panes industriales insípidos".
En El horno de Babette buscan un resultado dorado, sin perder la textura interior. Se puede terminar regándolas con azúcar, pero si han tenido un buen proceso, es mejor evitarlo para no anestesiar el paladar y "poder disfrutar de esos aromas complejos y sofisticados que puedes encontrar en nuestra torrija". Quizá, entonces, es que no es tan simple como parece. Así que si no salen en casa, o si prefieren dedicar el tiempo para pasear, ya sabe dónde ir a comprarlas.