The White Lotus fue una de las grandes triunfadoras de la última edición de los Globos de Oro. La ficción de HBO Max fue galardonada en dos categorías: mejor miniserie y actriz de reparto (Jennifer Coolidge). Recordemos, por cierto, que ya arrasó en los premios Emmy con hasta un total de diez estatuillas.
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La serie es una sátira social que refleja las diferentes clases sociales. Su trama se desarrolla en un exclusivo resort y sigue las peripecias de varios huéspedes y empleados durante una semana. The White Lotus se ha grabado en unos enclaves de ensueño, pues si la primera temporada la historia tiene lugar en un increíble hotel de Hawái, la segunda entrega se desarrolla en un complejo de lujo en Sicilia. Los vemos.
Four Seasons Resort Maui
El fastuoso Four Seasons Resort Maui de Wailea es un hotel de cinco estrellas, no apto para todos los bolsillos, pues los precios son desorbitados: alojarse una noche en este paradisiaco lugar te costaría más de 1.200 dólares, o lo que es lo mismo, unos 1.018 euros. Tiene 380 habitaciones (muchas son suites).
Como bien refleja la serie (o no tanto), el complejo tiene una amplia oferta de actividades. Y tampoco son baratas. Una excursión entre ballenas puede salir por 23.750 dólares, mientras que una vuelta en helicóptero asciende a 26.450. Además, tiene un spa y centro de bienestar que proporciona oferta masajes, tratamientos faciales y servicios de belleza.
Palacio de San Domenico
La segunda temporada, estrenada el otoño pasado, tiene lugar en el Palacio de San Domenico, en el pueblo de Taormina. Este convento del siglo XIV, acoge otro exclusivo hotel del grupo Four Seasons. Las vistas que gozan sus huéspedes son maravillosas, ya que está construido sobre un acantilado que mira al mar y al antiguo teatro grecorromano Antico di Taormina. Desde sus habitaciones también se vislumbra el volcán Etna.
Los precios por noche parten desde los 2.500 euros. La suite Etna, por ejemplo, cuesta más de 5.000 euros. Como era de esperar, el hotel cuenta con todo tipo de servicios: desde una piscina infinity de 21 metros al borde del acantilado hasta un moderno gimnasio y un spa donde relajarse.
