Probablemente, si has hecho limpieza en los armarios, te darás cuenta de que igual hay zapatos que no te has vuelto a poner por alguna mancha que nunca supiste cómo eliminar. Y es que algunos tejidos son más susceptibles de mancharse que otros y, aunque hayas probado todo tipo de productos, la suciedad sigue en la prenda.
De entre todos los tejidos, uno de los más sensibles es el ante, que suele acumular ya algunas manchas a las pocas horas de ser estrenado. Especialmente en zapatos y zapatillas, cuya proximidad al suelo facilita la aparición de churretes, lamparones, y salpicaduras, bien por la caída de la lluvia, por la pisada de otra persona o por el roce con algún objeto de la calle que no esté limpio.
Lea también: El truco con el que acabarás con el desperdicio de comida (y ahorrarás dinero)
Los zapatos de serraje son muy habituales en el vestidor de cualquier persona. Y aunque visten y combinan a la perfección, por ejemplo, con cualquier vaquero, lo cierto es que es muy difícil evitar que estos se acaben enfangando.
Seis maneras de quitar las manchas en zapatos de ante
Por este motivo, desde Informalia ofrecemos varios trucos para hacer desaparecer las manchas del ante, sea cual sea su tipo: polvo acumulado, manchas de barro, de agua, de grasa o aceite, manchas por humedad, por rozaduras o pisotones o de pintura.
Polvo acumulado
Para eliminar el polvo acumulado sobre unos zapatos de ante en el armario se debe usar un cepillo especial para calzado, de cerdas suaves. También sirve un cepillo de dientes sin utilizar. Finalmente, pasa un paño húmedo por la superficie.
Manchas de barro
Si se manchan tus zapatos o zapatillas de barro, debes esperar a que estas se sequen. Esto es crucial, ya que si sigue el barro húmedo puedes terminar extendiendo la mancha por toda la superficie. Una vez seco, se debe utilizar un cepillo especial y realizar el mismo procedimiento que con el polvo. En caso de no desaparecer la mancha, puedes ayudarte de una lima de uñas o un papel de lija fino para raspar con suavidad la zona afectada.
Manchas de agua
Si se trata de unas simples gotas, hay que frotar con un paño seco la superficie para eliminar la humedad y dejarlo secar a temperatura ambiente. En caso de caerte encima un chaparrón que ha dejado tu calzado empapado, mete dentro gran cantidad de papel absorbente que evite que se deformen.
Manchas de grasa o aceite
Es la circunstancia más delicada, ya que cualquier mínimo error puede fastidiar el calzado. Hay quienes utilizan amoniaco para eliminar el aceite diluyendo un poco de producto en agua para luego frotarlo con un cepillo en la misma dirección. Después se debe pasar un paño húmedo y dejar secar al aire.
Lea también: Desvelan un truco para perder más calorías mientras caminas: así puedes perder peso más rápido
Otra opción es utilizar polvos de talco. Esto solo funciona si la mancha es reciente. Se debe recubrir la superficie afectada con polvos y dejar que se seque por completo. Luego se retira el polvo con un cepillo. También existen productos desengrasantes con los que humedecer un paño que se pasará por la zona manchada hasta que desaparezca.
Manchas por humedad
En este caso, hay que utilizar soda o incluso tónica como la que mezclas con la ginebra. Humedeciendo un paño con este líquido y pasándolo por la superficie el calzado mejorará. Posteriormente, se debe secar con un paño seco o algodón para no perjudicar al tejido.
Manchas por rozaduras o pisotones
En caso de rozadura o pisotón, hay tiendas especializadas de calzado en las que venden unas gomas especiales para manchas en tejidos delicados. En caso de no encontrarlas, puedes usar una goma de borrar escolar y frotarla por la zona manchada hasta que se elimine. Después peina con un cepillo la zona hasta dejarla como estaba.