Como en la legendaria El Ladrón de Bagdad (Raoul Walsh, 1924), nuestro Borbón nos ha robado la verdad, por evidentes razones de seguridad, y nos ha ocultado su plan secreto para celebrar su 51 cumpleaños acompañado de la ministra de Defensa, Margarita Robles. La alfombra voladora ha llevado al monarca y a la comitiva que le acompaña a una de las zonas más peligrosas del planeta. No tiene el día libre, como se ha publicado, no ha despejado su agenda para comer tarta con sus hijas ni para ir al cine con la Reina.
El Rey, en Irak para visitar las tropas españolas en misión internacional https://t.co/zDZ6Jqiqvh pic.twitter.com/8W16duUfri
— Casa de S.M. el Rey (@CasaReal) 30 de enero de 2019
Si el año pasado, cuando el Jefe del Estado cumplía 50 años, la Casa Real nos regaló un vídeo del monarca en su intimidad, con su mujer y sus dos hijas, este 2019, el regalo ha sido visitar a nuestras tropas en Bagdad, que forman parte de la coalición internacional contra el DAESH y así pasar el día de su 51 cumpleaños con los 551 militares y guardias civiles dedicados a adiestrar a las fuerzas iraquíes en Bagdad y en Besmayah.
Es la primera vez que Felipe VI viaja a Irak y la segunda que visita una misión militar española en el extranjero desde su proclamación como Rey, después de haber viajado a Líbano en abril de 2015.
Ataviado de uniforme de campaña árido, el jefe del Estado tomaba tierra en Bagdad a las 7.30 horas (hora local, dos horas menos en España peninsular), acompañado por la titular de Defensa. Como es lógico, el viaje se ha organizado con el máximo secreto por motivos de seguridad, lo cual dio pie a ciertos medios para que publicaran que Su Majestad se había despejado la agenda para tomarse el día libre.
Pero lo cierto es que Felipe VI apenas tendrá tiempo para soplar las velas: la visita incluye una reunión con el presidente de Irak, Barham Salih, en el Palacio de las Mil y Una Noche, el palacio Presidencial.
Luego se desplazará a Besmayah, donde se encuentra el grueso de los efectivos españoles. Los militares españoles llegaron a Bagdad hace ahora cuatro años, como parte de una coalición internacional formada por 60 países y liderada por Estados Unidos para combatir el terrorismo, dentro de la operación Inherent Resolve.
Es muy posible que el Jefe de Estado, que será recibido con honores y recorrerá la base para conocer el trabajo diario del contingente, sea objeto de algún homenaje propio de su aniversario, como las felicitaciones de autoridades y tropas.
De momento, la nota oficial dice que visitará el centro médico, firmará en el libro de honor de la base Gran Capitán y compartirá un café con el contingente en su comedor, antes de regresar a Bagdad y desde allí a Madrid, donde retomará su vida privada.
Tal vez el Rey llegue a tiempo para contarles a Letizia, a la princesa de Asturias y a la infanta Sofía (si están despiertas) cómo es Bagdad mientras cenan juntos con la vajilla de San Claudio (un superventas en unos grandes almacenes después de salir en el famoso vídeo de Casa Real), hablan de los exámenes del colegio o repasan alguna lección. Porque mañana hay cole.
El Rey, con el contingente español en Irak. @Defensagob @NATO @EmbEspIraq @SpainIraq https://t.co/n0Fe5tIWui pic.twitter.com/umbexfxkxF
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