El emérito navegaba en compañía de una hermosa fémina cuando uno de sus escoltas le avisó de que la reina visitaba el barco. Éste, ni corto ni perezoso, cogió a la modelo de un brazo y la tiró por la borda. Pasó hace más de 20 años y lo ha desvelado ahora el diario italiano Corriere della Sera.
La ajetreada vida marital y sentimental de Juan Carlos ha traspasado las fronteras y la prensa extranjera se ha subido al carro de las anécdotas con motivo del 80 cumpleaños del padre de Felipe VI. La última, desconocida hasta el momento, sucedió hace ya más de 20 años y la rescata el Corriere della Sera, que asegura que el rey disfrutaba de unos días de vacaciones y decidió navegar en su barco en compañía de una bella modelo. La apacible jornada se vio interrumpida cuando uno de los escoltas reales avisó: "Señor, ¡que viene la reina!". Al parecer, éste cogió a la mujer de brazos y piernas y la tiró al mar, donde fue recogida por una lancha de salvamento: "Sofía fue recibida por un sonriente Juan Carlos y una botella de champán fría", asegura.
El diario describe al emérito como un hombre inteligente aunque más instintivo que racional, algo que él mismo habría desvelado a un conocido político: "De aquí ando escaso (dijo señalándose la cabeza) pero de aquí soy invencible (apuntando a su nariz)". Aseguran que, con su carácter latino, ha sabido cómo hacerse querer y convertir a la gente en 'juancarlista' más que en monárquica. Por el contrario, Felipe no ha heredado el carácter de su padre: "El hijo es seco y riguroso, parece nórdico, muy diferente a su padre".