La carta que le ha escrito el príncipe Andrés a su madre, la reina Isabel II, ha hecho explotar los cimientos de la Familia Real británica. En la misiva, pide mayor protagonismo para sus hijas, Beatriz y Eugenia, que quiere que trabajen exclusivamente para la Corona, así como que residan en el Palacio de Buckingham.
Estas declaraciones se unen a las palabras de una de sus hijas, Beatriz, que ya habló hablado anteriormente de la atención que recibía Kate Middleton. "Ella acude a los eventos más glamourosos, tiene mucha ropa, una limusina y un equipo de protección real privada y yo tengo que viajar en turista". Unas afirmaciones que ya dejaban entrever las rencillas que existían en el núcleo familiar y que ahora han salido a la luz.
En la carta, redactada por la secretaria personal del príncipe Andrés, Amanda Thirsk, el hijo de la reina Isabel II expresa su preocupación por el futuro de sus hijas cuando ésta fallezca y el príncipe Carlos se convierta en rey. A lo largo de la misiva queda patente algo de lo que ya se había hablado en el pasado: los celos que tiene la familia York hacia los duques de Cambridge y el príncipe Enrique.
Según confirma una fuente al Sunday Express, el príncipe también habla de lo marginado que se siente él mismo respecto a su familia, pues su agenda no es pública, y ni siquiera tiene una entrada principal en la página web de la Casa Real, entre otros detalles.
El duque de York, por último, alega que como únicas princesas de sangre de la familia sus hijas se merecen el mismo papel que sus primos, así como los mismos privilegios en cuanto al alojamiento. Además, añade la extensa formación de las jóvenes.
Beatriz (28) es licenciada en Historia, y Eugenia (26) en Filología Inglesa e Historia del Arte. Ambas ocupan, respectivamente, el séptimo y octavo lugar en la línea de sucesión al trono del Reino Unido.La reina Isabel II no ha contestado a su hijo, pues al parecer, no se esperaba tales peticiones, por lo que le ha cedido el trabajo a su secretario personal, quien ha sido el encargado de discutir dichas condiciones con el heredero a la corona, que ha sido contundente en su respuesta. El príncipe Carlos ha decidido hacer caso omiso a las palabras de su hermano y se ha pronunciado a favor de que la situación continúe igual, puesto que quiere "una monarquía austera, centrada en Guillermo, Enrique y Kate". Esta idea supondra que cuando fallezca la reina Isabel II, sus sobrinas dejarán de formar parte del núcleo principal de la Familia Real.