La reina debe guardar reposo desde el pasado mes de agosto debido a una arritmia cardíaca. Su hijo Felipe ha ordenado emitir un comunicado oficial para explicar su situación.
La salud de Paola de Bélgica (78) no se encuentra en su mejor momento. La reina sufre una arritmia cardíaca que la obliga a guardar reposo desde el pasado mes de agosto. Ahora, los responsables de comunicación del palacio belga han emitido un comunicado, por orden del rey Felipe, en el que aclara la situación de su madre: "Su Majestad la reina Paola sufre una arritmia cardíaca, se encuentra actualmente bajo tratamiento y monitoreo para determinar la terapia adecuada".
Asimismo, se comunica que la agenda de la reina queda interrumpida hasta finales de año, tiempo que Paola dedicará a recuperar en casa debidamente. Se cancelan así su asistencia a diferentes actos de su fundación benéfica y también los viajes privados que realiza habitualmente a Italia y Francia acompañada por su marido, el rey Alberto II, con el que se encuentra en su mejor momento después de una vida marital repleta de terceras personas y profundas crisis.