Como decíamos septiembre anuncia regatas para don Juan Carlos. La pasión por la vela, que une al emérito y su hija les llevará hasta Nueva York. Allí, a partir del día 17, el padre de Felipe VI, de 87 años, tiene una cita en el Seawanhaka Corinthian Yacht Club, en Oyster Bay cerca de Manhattan, donde se celebrará el campeonato Mundial de Vela de la clase de 6 metros. Antes, este fin de semana, se espera nueva visita del ex jefe del Estado a Galicia. Se trata de una cena con amigos en una batea mejillonera. Lo publica El Confidencial.

Septiembre viajero para el monarca si se confirma su nuevo tour a Sanxenxo, en Pontevedra. Siguiendo la tradición, el exmonarca planea una cena que tendrá lugar este sábado 13 de septiembre. Será un encuentro discreto y privado con amigos que forman parte de su círculo más cercano cuando viaja a la ría pontevedresa.
Entre las personas de máxima confianza figura el presidente del Real Club Náutico de Sanxenxo, Pedro Campos, quien además ejerce de anfitrión de Juan Carlos I en cada de una de sus visitas. Campos, que ha abierto las puertas de su casa al emérito y le ha recogido en el aeropuerto de Peinador de Vigo en múltiples ocasiones, se ha convertido en su soporte más firme y leal. Allí, en Sanxenxo, el padre del Rey se siente como en casa y lleva una vida social muy discreta, limitada a algún restaurante de la zona. Este verano ha recibido las visitas de su hija Elena, su hermana Margarita y de sus sobrinos María y Alfonso Zurita.
Deporte, tradición y gastronomía se unen en esta fiesta de alma gallega. Se trata, como detallan en El Confidencial, de una cena que tendría lugar sobre una batea, la estructura de madera donde se cultiva el mejillón y que configura el paisaje marino de la zona. Las plataformas flotantes, que abundan de las Rías Baixas, favorecen el desarrollo de estos preciados bivalvos. Sería en una de estas bateas, con unas vistas infinitas sobre el Atlántico, donde se celebraría la cena, con mejillones y vino gallego.
Este encuentro con amigos sería la previa del viaje a Nueva York que le espera al emérito, donde pretende, a sus 87 años, revalidar el título de campeón del mundo con el Bribón 500, tras proclamarse vencedor en la edición de 2023, que tuvo lugar en el mes de septiembre en la isla de Wight en Reino Unido Fue justo ahora hace dos años. Aquella victoria, la tercera en esta categoría para el emérito, supuso un orgullo que compartió con su hija mayor, la infanta Elena. "Tenemos un equipo sensacional. Lo hemos luchado mucho", dijo en aquella ocasión el padre de Rey posando con la tripulación del Bribón y la bandera de España. Se espera que repita cita en el Seawanhaka Corinthian Yacht Club, en Oyster Bay próximo a Manhattan, y que la infanta le acompañe.