Casas Reales

Críticas feroces a Federico y Mary de Dinamarca por subirse el sueldo cuatro millones

  • La asignación de la Familia Real danesa en 2023 era de 126 millones de coronas (16 millones de euros) y ha pasado a 143 millones (19 millones)

126 millones de coronas (unos 16 millones de euros) era la asignación de la Familia Real danesa con fecha de 2023. O sea, lo que les cuesta a los contribuyentes cubrir el presupuesto anual de la Casa, según datos del diario Ekstra Bladet del pasado mes de enero, fecha en que tuvo lugar el relevo en el Trono. Federico X, que recogió el testigo de Margarita II tras 52 años de reinado, ahora se ha subido el sueldo.

El monarca comenzó su andadura con los ojos puestos en Mary. Debía afrontar su crisis de imagen tras el episodio del huracán Genoveva Casanova y debía luchar por su matrimonio, una batalla que le llevó hasta Australia en busca del perdón de su mujer. En un tiempo récord, se abrió paso entre la tormenta mediática que descargaba sobre él y se ensanchó el horizonte, gracias sobre todo a la abdicación de su madre.

Ahora, cuando se cumplen cinco meses en el Trono y para hacer frente a los gastos derivados del relevo en la jefatura del Estado, Federico X se ha subido el sueldo en casi 4 millones de euros, según publica el mencionado diario danés. El monarca y su mujer mantienen su asignación, que corresponde a 3 millones. De este montante salen las partidas para cubrir los gastos de personal y de palacio. La subida ha despertado malestar entre los que critican su eficacia y que, además, no se ven representados por él. La gente está "enfurecida" y "harta", publica El Español, que cita a la prensa danesa.

Los castillos del Estado

El dinero que el Estado inyecta a la Casa, que lleva la denominación de apanage (significa prerrogativa y hace referencia a la renta), está regulado a través de la Ley de Finanzas. Esta subvención cubre gastos de personal, administración y gastos privados. Se calcula que el sueldo que perciba Margarita II corresponda al 10% de lo asignado a su hijo, según Ekstra Bladet. A esa asignación millonaria hay que sumar la dotación destinada para la conservación de castillos, cuya propiedad recae en el Estado. Entre los más célebres, los de Amalienborg y Christiansborg.

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