Kate Middleton ha roto su silencio para confirmar que tiene cáncer. En un vídeo que fue grabado el pasado miércoles por la BBC, la princesa de Gales se enfrenta al vacío mediático producido por su prolongado silencio y por fin habla de su enfermedad. Le ha sido diagnosticado un cáncer, si bien no ha especificado de qué tipo.
Su Alteza Real ha aparecido ataviada como corresponde a este primer día de primavera: con un jersey marinero de rayas. No demacrada pero con poco maquillaje, aparentemente, y, eso sí, visiblemente más delgada. La princesa ha sido muy directa, no ha empleado una milésima de segundo para el victimismo y ha exigido respeto por sus hijos y el resto de su familia.
George, Charlotte y Louis son la máxima preocupación de la princesa de Gales
George, Charlotte y Louis son, como es lógico, la máxima preocupación de la princesa de Gales y sus hijos son la más que compensible excusa que ha esgrimido para que comprendamos por qué no había revelado públicamente hasta ahora lo que le sucede. "Lo más importante, nos ha tomado tiempo explicarles todo a George, Charlotte y Louis de una manera apropiada para ellos, y asegurarles que voy a estar bien", ha sentenciado kate este viernes en el vídeo donde ha revelado su enfermedad.
Ha sido este viernes, víspera de la Semana Santa en España, cuando sus asesores, entendemos que de acuerdo con los príncipes de Gales, han emitido el anuncio grabado el pasado miércoles, como ya apuntábamos. Como los estudiantes españoles, es este viernes cuando los hijos de los príncipes comienzan sus vacaciones de Pascua y no tendrán que acudir a Lambrook School hasta dentro de algo más de una semana. En estos días, Kate y su marido explicarán como mejor consideren la situación a la que se enfrenta su madre. Kensington Palace ha confirmado que tanto el primogénito George (que cumple 11 años en julio), como su hermana Charlotte (de ocho) y el benjamín Louis (cinco años) están al tanto de la enfermedad de su madre desde hace días.
Guillermo acudió con su mujer a conocer el diagnóstico de cáncer. Ese fue y no otro el motivo por el que Guillermo no acudió al servicio religioso por Constantino de Grecia celebrado en el castillo de Windsor. Estaba planeado que el futuro rey de Inglaterra estuviera en la misa en recuerdo de su padrino de bautizo.
En un principio, según el anuncio emitido este viernes, cuando en enero fue sometida una "intervención quirúrgica importante" en el abdomen, no se esperaban que estuviera frente a un cáncer. A finales de febrero, cuando tuvo lugar el funeral del monarca heleno, los médicos diagnosticaron la enfermedad.
