Continúa la formación castrense de la heredera de Felipe VI. La princesa Leonor se ha adaptado muy bien a la Academia Militar de Zaragoza y también a todos sus compañeros, con los que ya comparte noches de juerga en la ciudad del Ebro. En los próximos días, concretamente del 3 al 9 de febrero, los cadetes cambiarán la discoteca por el campo y afrontarán una nueva semana de adiestramiento militar, la más complicada y dura hasta el momento.
Si el pasado mes de diciembre Leonor y sus compañeros se trasladaron a los Pirineos para realizar prácticas en nieve y montaña, en esta ocasión su destino será de tierra. Según Monarquía Confidencial, los alumnos de La General llevarán a cabo nuevos ejercicios de instrucción y adiestramiento, como marchas y recorridos topográficos. Además, la princesa de Asturias y sus compañeros también realizarán ejercicios de tiro con fusil de asalto y pistola en simulador, ejercicios de fuego real con diversas armas individuales y colectivas, así como paso de pista de combate e instrucción individual del combatiente. También formarán pequeñas unidades de exploración y ejercerán el mando en ellas con sus propios compañeros.
Se trata de un paso más en la formación castrense de la heredera, cuyo plan de estudio está adaptado para que pueda finalizar en tres años su paso por los tres ejércitos (Tierra, Mar y Aire), antes de entrar en la universidad. La hija de Felipe VI y Letizia ingresó en la Academia Militar de Zaragoza el pasado mes de agosto y tras las primeras semanas de instrucción básica, juró bandera y recibió el sable oficial que simboliza su futuro mando.
Una heredera orgullosa y aplicada
Desde entonces, la hemos visto (gracias a las imágenes distribuidas por Casa Real) en clase y en maniobras junto a sus compañeros, vestida de uniforme, con casco, mochila y el fusil reglamentario, el HK G36. También en la nieve, concretamente en el campamento que tiene la Escuela Militar de Montaña y Operaciones Especiales en la parte alta de Candanchú, Jaca.
En octubre, además, la vimos por primera vez vestida de militar junto a su padre en el desfile de las Fuerzas Armadas del Día de la Hispanidad. En enero repitió estampa, más regia todavía con su uniforme de gala, por la Pascua Militar en el Palacio Real. Su padre presumió orgulloso de ella en los corrillos y sus superiores también: "Es una alumna brillante".
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