La abdicación de la reina Margarita, que ella misma anunció durante su último discurso del año, ha caído como una bomba dentro y fuera de Dinamarca. Se trata de un movimiento inesperado tras el escándalo de la amistad entre el príncipe Federico y Genoveva Casanova, así como la escapada del heredero a Madrid sin escoltas. Aseguran que la decisión no nació de la reina sino que se trata de la respuesta al ultimátum definitivo de la princesa Mary: "O somos reyes o me marcho a Australia".
La humillación de la princesa tras la traición de su marido solo podía acabar de dos maneras: en divorcio o en coronación. Mary Donaldson no quería perdonar una nueva infidelidad, menos a ojos del mundo entero, y a pesar de que un divorcio la hubiera dejado en una situación complicada debido a las capitulaciones matrimoniales que firmó tras su boda, no estaba dispuesta a ser un títere de la corona danesa. En una de sus últimas conversaciones con la reina Margarita, puso las cartas sobre la mesa: "O somos reyes ahora o esto se acaba".
Una conversación de la que Luis Pliego ha dado detalles en Tarde AR: "Si algo me sobra son fuentes en Dinamarca. Hablo de compañeros de palacio, gente que sabe lo que está pasando. En realidad la abdicación es algo que la propia Mary pidió: 'O somos reyes ahora o esto se acaba'. Dijo que regresaba a Australia".
Asegura que la abdicación de la reina danesa lleva gestándose semanas, desde que saltó el escándalo de su hijo Federico y Genoveva Casanova. Entonces, Mary impuso sus condiciones para perdonar al padre de sus hijos y, tras el ultimátum, viajó con dos de ellos a su tierra natal para demostrar que no bromeaba. "Cuando Federico fue a Nueva Zelanda a reunirse con ella le comunicó que la reina había aceptado: 'Ya está hecho', le dijo".
Abdicación histórica
El 14 de enero, la soberana abdicará, convirtiéndose en la primera en hacerlo en casi 900 años en Dinamarca. En ese momento, Federico y Mary Donaldson se proclamarán reyes. El Príncipe pasará a ostentar el nombre de Federico X, será el jefe de Estado, la autoridad suprema de la Iglesia del Pueblo Danés y por supuesto comandante en jefe de las Fuerzas Armadas Danesas. "Es el momento adecuado", expresó Margarita, de 83 años, apuntando a sus problemas de salud como motivo de su decisión.

En 2016, su discurso era bien distinto: "En mi opinión, es parte de la posición que tienes cuando heredas una monarquía: es una tarea que te han encomendado y que mantienes durante tanto tiempo como vives, como lo hizo mi padre y mi abuelo antes que él. En este país no hemos adoptado esa forma de entregar el poder. Siempre ha sido 'te quedas mientras vives'. Eso es lo que hizo mi padre y mis predecesores. Y mi forma de ver las cosas también. Mi hijo reinará cuando yo no esté aquí".
Horas después del anuncio, la Familia Real Danesa reaparecía casi al completo en la tradicional cena de gala de Año Nuevo que la Reina Margarita ofreció en el Palacio Real de Amalienborg a los Cuerpos Oficiales, el Cuerpo Diplomático, las Fuerzas Armadas y la Agencia Danesa de Emergencias para brindar por el 2024.
Relacionados
- Algo huele a perdón en Dinamarca: Mary reaparece exultante y seguirá con Federico a cambio de ser reina
- Mary de Dinamarca y su nueva normalidad: del no aceptaría una infidelidad al paseo de la mano con Federico
- Federico y Mary de Dinamarca, de paseo agarrados de la mano en su vuelta a casa: y aquí no ha pasado nada...