Diana de Gales es mucha Diana. En titulares estos días gracias al estreno de la segunda parte de la temporada final de The Crown, la princesa refuerza su imagen inmortal en una subasta millonaria. Su vestidor sigue generando entre los coleccionistas una atracción magnética.
Se trata de un vestido que Diana lució en 1985, cuando el matrimonio de los príncipes de Gales llevaba cuatro años de andadura y dos hijos, Guillermo, entonces de 4 años, y Harry de uno. El vestido ha sido vendido en la casa Julien's Auctions, en EE UU, por 1.143.000 millón de dólares (1 millón de euros aproximadamente). La pieza se lanzó con un precio de salida de 100.000 dólares (91.000 euros).
Es cierto que la serie de Netflix ha disparado exponencialmente el interés del público por Diana y por su figura. El catálogo de vestidos que luce la actriz Elizabeth Debicki en su papel de la princesa en The Crown nos acerca a la imagen universal de la consorte, llamada a ser reina, convertida en icono tras su divorcio del heredero Carlos y su trágica muerte, a los 36 años, en aquel fatídico accidente de coche en París.
Conocido es que la princesa empleaba sus looks para canalizar mensajes a la prensa sobre su soledad en palacio o aquel vestido de la venganza que pasó a la historia. Ahora uno de sus vestidos vuelve a batir récords al ser adjudicado en subasta por una cifra millonaria. Todo un ejemplo de permanencia en el tiempo. Es una pieza de cóctel creada por Jacques Azagury en colores negro y azul navy con falda de organza de inspiración bailarina rematada con un gran lazo.