La reina Sofía ha roto a llorar en la entrega del premio rector honorífico en la Universidad Camilo José Cela, su último acto antes del próximo 31 de octubre, día en el que la princesa Leonor cumplirá 18 años y jurará la Constitución ante las Cortes. Tal y como hizo el rey Felipe VI en 1986.
En el acto, que se ha celebrado este viernes, la reina emérita se ha emocionado durante el nombramiento de Emilio Lora-Tamayo como Rector Honorario Vitalicio de la Universidad Camilo José Cela. El premiado, debido a su edad avanzada, tiene delicados problemas de salud.
Aunque la madre de Felipe VI se ha enjugado las lágrimas con la ayuda de un pañuelo, no ha perdido la compostura, siendo consciente de su papel institucional. Al abandonar el acto, doña Sofía se ha mostrado muy cariñosa con el galardonado, que ha abandonado el recinto en silla de ruedas debido a sus problemas de movilidad. Mientras este salía del recinto, la abuela de la princesa Leonor le ha cogido del brazo, protagonizando una escena entrañable.
Para la ocasión, la reina Sófia ha optado por un elegante traje de rayas diplomáticas en color azul marino. Asimismo, la madre de la Infanta Cristina lo ha combinado con una blusa de satén en color champán y unas discretas joyas en color dorado.
No volveremos a ver a la Reina hasta el próximo martes, día en que la princesa Leonor jurará la Constitución ante las Cortes. Doña Sofía estará presente en la celebración de carácter privado, que tendrá lugar en el Palacio Real del Pardo. A la celebración también asistirán el rey Juan Carlos, sus hijas las infantas Elena y Cristina, y parte de sus nietos: Miguel e Irene Urdangarin estarían ya confirmados, Froilán, Juan y Pablo Urdangarin lo intentarán por todos los medios, mientras que Victoria Federica no estará por tener un viaje privado con amigos a Perú.
