Álvaro de Marichalar, 62 años, no va a bajar 4.000 metros en un submarino para ver el Titanic. Pero sus aficiones de aventurero también conllevan riesgos. El tío aventurero de Froilán y Victoria Federica continúa su vida navegando en solitario por los mares del mundo, con su embarcación acuática. El hermano mayor de Jaime de Marichalar se encuentra desde hace dos meses en Panamá, donde se propone atravesar con su moto acuática, Numancia, de tres metros de eslora, el famoso canal que comunica el Atlántico y el Pacífico.
Numancia, llamada así por las ruinas encontradas por uno de sus antepasados, en la finca de los Marichalar en Soria, está averiada y, mientras acaba de ser reparada, Álvaro, también espera el permiso de la Autoridad del Canal para navegar por este pasillo marino, una solicitud que hizo ya el pasado abril.
El verso suelto de la familia del ex duque de Lugo navega de pie para no dañar su columna vertebral y ha hecho algunas modificaciones en la Numancia, como un depósito extra de combustible que le permite recorrer 350 kilómetros sin un barco de apoyo.
Después da batir varios récords mundiales como navegante solitario, el ex cuñado de la infanta Elena ha explicado en Panamá que recorrer el mar con esta modalidad tiene muchos riesgos, pero el más preocupante son los plásticos que se tiran al mar, a los ríos y a lagos, que en su caso se meten en las hélices de su embarcación y le pueden dejar tirado en medio del océano. Pero, aparte de esta posibilidad, Marichalar ha denunciado en una entrevista en la televisión panameña que nos estamos "comiendo basura, como consecuencia de las toneladas de plástico que acaba en el agua". Su defensa del medio ambiente marino ya forma parte de sus expediciones y en cada sitio donde tiene ocasión denuncia y propone soluciones sobre el tema.
¿Cómo paga sus aventuras?
El aventurero español financia sus travesías a través de patrocinios de marcas que le apoyan en los distintos países donde hace sus paradas. Álvaro de Marichalar lleva su vida familiar también en solitario, después de divorciarse en 2014 de la joven ucraniana Ekaterina Anikieva, 30 años menor que él y con la que solo estuvo casado tres años.
Otro de sus planes fallidos fue su efímera carrera política como candidato por UPyD, el partido de Rosa Díez, en el que Marichalar se postuló sin éxito para las elecciones al Parlamento Europeo en 2014.
Una carta que firmó públicamente, pidiendo que Cristina de Borbón renunciara a sus títulos y derechos dinásticos y pidiera "perdón para que algunos españoles la podamos volver a respetar y mirarla otra vez a los ojos", molestó profundamente a los Marichalar, que consideraron intolerable la arrogancia de su hermano, ya que a pesar del divorcio de Jaime y la infanta Elena, siguen siendo leales y partidarios sin fisuras de la Familia Real y la monarquía