La cumbre familiar que se celebra este viernes en Ginebra, será un espejismo de la antigua Familia Real española. Y también marcará el reencuentro de Iñaki Urdangarin no solo con Cristina, con quien aún está casado, sino con su cuñada la infanta Elena y los reyes Juan Carlos y Sofía.
En una entrega de premios este martes en Madrid, la infanta Elena confirmó que su padre estaría en Suiza para asistir la celebración de la mayoría de edad de su nieta Irene Urdangarín, que coincide también con su graduación. La cuarta hija de los ex duques de Palma, acaba de terminar sus estudios de Bachillerato en Ecolint, la prestigiosa Escuela Internacional de la ciudad suiza. La joven parece que empezará el próximo curso Administración y Dirección, dentro la carrera de hostelería, en L'Ecole Hotêliere de Lausana.
Se cumplen justamente cinco años del aquel día de junio de 2018, en el que el marido de la infanta Cristina ingresaba en la prisión de Brieva en Ávila. También fue un mes de junio, de 2014, cuando, Juan Carlos I renunciaba a su condición de jefe del estado. Este junio de 2023, uno y otro se ven las caras por primera vez, después de años alejados por razones que algo tienen en común.
Los dos han sido apartados de la vida palaciega por comportamientos poco ejemplares y los dos se guardan un gran resentimiento. Don Juan Carlos no le perdona a su ex yerno la infidelidad manifiesta hacia su hija. Y Urdangarin, que convive hace meses con Ainhoa Armentia, siempre ha considerado que el rey podía haber evitado su calvario judicial y está convencido que Zarzuela le dejó tirado y le usó como cabeza de turco para tapar otros desmanes que no fueron los suyos.
Pero Irene Urdangarín merece este reagrupamiento con sus padres, abuelos, sus primos, su familia. Es también una despedida de la vida que ha llevado hasta ahora. La joven deja la casa de su madre en Ginebra y deberá firmar en el documento de divorcio de sus padres, que se oficializará dentro de poco tiempo. La infanta Cristina y Urdangarin sólo esperaban la mayoría de edad de su hija para facilitar los trámites de la disolución de su matrimonio, más complicados cuando hay hijos menores.
Don Juan Carlos viajará desde Abu Dabi a Suiza, acompañado como siempre de Vicente García- Mochales, Mochi, el teniente coronel de la Guardia Civil y jefe de seguridad del emérito, su hombre de confianza y quien le sostiene literalmente en pie, dadas las dificultades del rey para caminar y moverse. Junto a este hombre, una especie de asistente, apoyo o guía, vimos al rey en la abadía de Westminster, para la coronación de Carlos III, también en el funeral del rey Constantino en Atenas, en las exequias de Isabel II en Londres, o más recientemente en la boda real de Jordania.
Se ha especulado mucho sobre el misterioso maletín o cartera que Mochales lleva siempre consigo, en la otra mano que no sostiene al rey. Y en algún medio han afirmado que se trata de un chaleco anti balas, algo que desmienten a Informalia en el entorno del antiguo monarca. "No tiene sentido llevar algo así encerrado en un maletín, en todo caso lo llevarían puesto. Se trata de algo tan sencillo como un cojín. Su Majestad lo necesita cuando se sienta, porque con su cadera tan dañada le duele cuando no la apoya en algo así. No hay ningún misterio".
