No nos consta que ni la reina Letizia ni sus hijas hayan pisado nunca la Feria de Sevilla, donde sí se han divertido Máxima de Holanda, el rey Guillermo y sus hijas o la reina doña Sofía, vestida de flamenca en más de una ocasión.
Que sepamos, tampoco nuestra reina o las princesas han visitado la romería del Rocío, ni se las ha visto en las calles de Pamplona durante San Fermín. O en Barcelona para la fiesta de San Jordi, donde se homenajea al libro y a la lectura. Tampoco han ido todavía a las Fallas de Valencia, donde pudimos ver un día a la infanta Elena en el balcón de las autoridades. No recordamos haber visto a doña Letizia vestida de chulapa, aunque suponemos que sí lo hecho de asturianina, con el bellísimo traje regional de la maravillosa tierra que la vio nacer hace medio siglo.
No hemos perdido la esperanza de ver a una reina tan guapa como la ovetense aflamencada, en la Feria o en el Rocío. Alguna aproximación ha tenido: a principios de febrero vimos a la reina en Luanda con un vestido negro con lunares blancos firmado por el sevillano José Hidalgo, un diseñador que compagina en su taller la creación de moda flamenca con piezas prêt-à-porter. De hecho, el modelo elegido por Letizia tiene versión en traje de flamenca dentro de su colección Gitanos, mostrada dentro de la pasarela We Love Flamenco 2019. En realidad, doña Letizia llevó en Angola ese vestido pero lo había estrenado el pasado verano junto a Jill Biden, en versión de marga corta, cintura entallada y falda en largo midi.
Lourdes Montes (39) es la última en reclamar que las mujeres de la Familia Real se hagan visibles en la próxima Feria de Abril en Sevilla. La esposa de Francisco Rivera (49), diseñadora de moda flamenca, amadrinó este miércoles en Las Rozas, a las afueras de Madrid, Moons, una clínica dental especializada en ortodoncia infantil y odontopediatría de la cadena Dontegroup, líder en la Comunidad de Madrid.
A un mes y medio de la Feria de Sevilla, Lourdes remata los últimos modelos de su colección de trajes de flamenca. "Estamos a tope", aseguró, "pero estoy muy contenta porque llevamos seis años y la marca está ya muy afianzada. Es una satisfacción ver que año tras año nuestras clientas repiten, son muy fieles", nos comentó. En cuanto a su opinión sobre la reina de España, insistió en la "obligación" de Letizia de ir acorde con las tradiciones populares. "Debe vestirse de flamenca, no lo ha hecho nunca y pienso que sería maravilloso", dijo la mujer de Fran Rivera.
Y como no hay rivalidad entre la actual esposa de Rivera y la anterior, Eugenia Martínez de Irujo, Lourdes confirmó que este año tiene de nuevo a Eugenia como clienta para vestirla de flamenca: "Tenemos una relación fantástica, ella es maravillosa". Lo mismo piensa de Tana, la hija de Francisco y la duquesa de Montoro, con la que mantiene una relación excelente. "Ella es fantástica, buena, generosa y una persona muy implicada con todo y lo hace muy bien siempre. Los niños la quieren mucho porque es su hermana mayor, es maravillosa, les da todo los caprichos. Llega Tana y es una fiesta", remató la segunda esposa de Fran Rivera.
El sueño de Lourdes de vestir de flamenca a Letizia no es tan impensable si miramos a doña Sofía o otras royals europeas. La emérita sí ha acudido en alguna ocasión a Feria de Abril vestida de flamenca, a caballo o a pie y luciendo trajes de faralaes ha paseado por el Real sevillano y también ha participado en la romería de El Rocío.
La primera vez fue allá por 1968, cuando aún era princesa, y su vestido ha pasado a ser un icono. Realizado en un tejido de popelín blanco con lunar grande rojo, escote en pico por delante y por detrás, mangas al codo con tres volantes rematados en tira bordada y con un largo por encima del tobillo, como se llevaba en aquella época.
En 1972, doña Sofía se unió por primera vez a la romería de El Rocío y protagonizó la portada de Hola. A estas citas se sucedieron otras en años posteriores y también nuevos diseños flamencos con lunares multicolor, verdes o blancos, variados y coloridos mantoncillos en tonos lisos y complementos o flores siempre a juego. En algunas de sus citas andaluzas estuvo con sus hijas, las infantas Elena y Cristina, también vestidas de flamencas.