Adiós a su magnetismo social. Los duques de Sussex no levantan cabeza en popularidad. Es lo que revela la encuesta de Ipsos, que ha medido el índice de simpatía de la familia real. Un informe hecho público este jueves 7 de abril en Reino Unido. El que más cae es el príncipe Harry, con respecto a la encuesta de 2018. Estos son los datos.
El jarro de agua fría para Harry y Meghan llega en forma de votos y números. Ipsos ha elaborado un ránking de los miembros de la familia real que mejor caen y más empatía generan con respecto a los menos populares.
A punto de cumplir 96 años y tras haber superado el Covid en febrero, la reina Isabel II sigue ocupando el corazón de los británicos y se mantiene en lo más alto de este ránking. La monarca se sitúa en el primer puesto con un 69% de votos favorables y un 12% de votos desfavorables. En la foto inferior, en el funeral de Felipe de Edimburgo el pasado 29 de marzo.
La soberana es seguida por su nieto Guillermo (con 64% de votos positivos, frente a 13% de votos negativos); y por Kate (que acumula un 60% de calificaciones positivas, frente a un 13% negativas). Los duques de Cambridge, en la segunda y tercera posición de esta lista, se colocan así por delante de Carlos y su mujer, que son los llamados a ocupar el trono después de la reina. El príncipe de Gales recibe un 43% de votos favorables (y un 25% desfavorables).
¿Y los Sussex?
Los Sussex se encuentran en los últimos puestos del ránking. Solo se sitúa por debajo de ellos el príncipe Andrés, repudiado socialmente desde la demanda de Virginia Giuffre por abusos sexuales.
El bajón de simpatía de la actriz norteamericana entre los británicos, traducido a datos, es de un 50% de respuestas desfavorables y un 24% favorables. En comparación con la misma encuesta realizada en 2018, Meghan Markle ha caído un 16% en el índice de popularidad. Pero quien más ha descendido es su marido: un rotundo 35% con respecto a la encuesta de ese año. Harry anota un llamativo 43% de votos en contra, frente a un 30% de votos a favor.
Este informe de Ipsos se ha llevado a cabo entre ciudados británicos del 24 al 25 del pasado marzo, días antes del memorial en homenaje a Felipe de Edimburgo.
Entre 2018 y 2022 la vida de los duques ha dado un vuelco
La caída de popularidad de los Sussex respecto a 2018 es más que evidente. El hijo de Carlos y su mujer anunciaron el Megxit, dejaron de formar parte de la familia real y abandonaron Londres. En 2021 las devastadoras revelaciones de la actriz, sus ideas suicidas y el comentario racista que sufrió acerca del tono de piel de su bebé, Archie, conmocionaron la opinión pública. Isabel II tuvo que romper la cultura del silencio de Buckingham y responder a las graves acusaciones. Después se descubrió que Carlos estaba detrás de ese nefasto comentario. Hasta Guillermo también salió en su defensa hablando de la falta de tacto de su padre.
Hace unas semanas, Harry declinó asistir al memorial en homenaje a su abuelo, el duque de Edimburgo, en Westminster, porque le preocupaba no contar con el dispositivo de seguridad cuando él y su familia estuvieran en suelo británico. Un gesto interpretado como un desplante y reproche hacia su familia. Fueron los grandes ausentes.
Tampoco ayuda nada a mejorar su imagen el que sus hijos estén tan lejos de los Windsor: la reina no conoce a la pequeña Lilibet (de 10 meses) y la última que vez que Archie (cumple 3 en mayo) visitó Londres fue en otoño de 2019.
