Mota-Engil avisa a Duro Felguera: "No inyectaremos más fondos. La inversión se hizo para obtener know-how"

El preconcurso de acreedores de Duro Felguera se acerca al tiempo de descuento, y pese a la situación crítica de la cotizada, uno de sus accionistas de referencia ya advierte que no piensa poner más dinero en el grupo. La portuguesa Mota-Engil, que entró en la cotizada española a través de una joint venture con la mexicana Grupo Prodi, es tajante cuando se le pregunta: "Para ser totalmente claro: No inyectaremos más fondos".

El consejero delegado del grupo luso, Carlos Mota Santos, defendió su postura en una reunión con analistas posterior a la presentación de resultados del ejercicio 2024. Así, la firma asturiana y la Sepi ya han obtenido, de manera directa, la negativa de una de las dos patas que salieron al rescate en febrero de 2024 con una ampliación de capital de 90 millones de euros.

El ejecutivo justificó la decisión al defender que se trataba de una inversión instrumental para Mota-Engil México -el vehículo que ostenta el 24% del capital-. "Necesitábamos las capacidades técnicas, el currículum y el conocimiento para competir en nuevos sectores industriales. Esta fue la razón principal por la que hicimos la inversión", desgranó. La voluntad de Mota-Engil era tanto aprender en la industria de la construcción de plantas como en energía.

"Podemos concluir que la inversión ya está dando sus frutos, pues se nos están adjudicando ya los primeros proyectos vinculados a estos sectores", celebró.

Según sus cálculos, ostenta alrededor del 14% de las acciones de Duro Felguera, pues tiene mayoría en la joint venture que comparte con Grupo Prodi, el accionista mexicano que tiene en solitario alrededor del 31% de los títulos. El vehículo controlado por José Miguel Bejos se antoja -a la espera de que aparezca un potencial nuevo inversor- como el único grupo privado que podría aportar algo de dinero más allá de la Sepi.

Los 90 millones de Prodi y Mota-Engil

Mota-Engil se muestra así totalmente en contra de incrementar la aportación hecha en 2024 cuando, de la mano de Grupo Prodi, inyectó 90 millones de euros en una ampliación de capital que duraron menos de un año en las arcas de la organización. La quema de caja de varios proyectos que tenía en marcha hicieron evaporar el montante aportado por ambos inversores.

No convenció tampoco el ambicioso plan de negocio, llamado Plan México, con el que el grupo aspiraba a crecer en Norteamérica con hasta 8.000 millones en oportunidades por captar. Sin embargo, para acceder a ellos se requerían más de 300 millones de euros en avales de la banca, que las entidades -escarmentadas por las últimas restructuraciones acometidas- se negaron a incrementar.

Mota-Engil controla el 51% de la filial Mota-Engil México -la tenedora de las acciones de Duro Felguera-. El 49% restante está en manos de Grupo Prodi. En 2024, el grupo registró unos beneficios de 123 millones de euros. Mientras, la facturación fue de 5.951 millones y el ebitda alcanzó los 955 millones.