Industria

Fragmentación, regulación y coste energético segan la competitividad de la industria en Europa

  • Firmas industriales y energéticas piden que la transición climática no implique el empobrecimiento de la sociedad 
  • La amalgama de regulaciones y supervisores también dificulta la creación de actores globales para competir con China y Estados Unidos 
Imagen de la primera mesa de debate del XI Foro Megatendencias: Industria y Competitividad. EE

elEconomista.es
Madrid,

En las últimas semanas, la industria europea ha anunciado alrededor de 100.000 despidos por la pérdida de competitividad. El problema, que nace en Alemania, pero se extiende por todo el continente tiene en jaque a las grandes compañías europeas, que ven como Estados Unidos y China crecen sin tantas cortapisas. No obstante, las grandes empresas tienen al menos un consuelo, como diagnostica Francisco José Riberas, presidente ejecutivo de Gestamp: "Sabemos lo que tenemos que hacer, pero hay que hacerlo rápido".

En el marco de XI Foro Megatendencias: Industria y Competitividad organizado este miércoles en Madrid por parte de elEconomista.es, Francisco José Riberas, presidente ejecutivo de Gestamp; Antonio Huertas, presidente de Mapfre; Olvido Moraleda, presidenta de BP en España y Fernando Silva, presidente y CEO de Siemens España participaron en una mesa redonda bajo el título Hacia una industria más competitiva para abordar los retos que afrontan España y Europa para no perder comba frente a otras potencias.

Las trabas están localizadas: fragmentación frente a un gran mercado único, exceso de regulación que dificulta la innovación y un coste energético que llega a quintuplicar el de las otras grandes potencias. "Soy optimista, pero hay que priorizar. Europa tiene que priorizar porque si esto no ocurre la consecuencia es nefasta. Y sí, estamos en el camino, pero hay que seguir haciendo camino porque queda mucho por hacer", señaló Olvido Moraleda.

El primer reto es como volver a ser referentes en innovación, cuando se dan situaciones como la creación de una nueva ley para regular la Inteligencia Artificial sin tener un ecosistema potente ni siquiera desarrollado. "Competitividad e innovación van de la mano. Y muchas veces suceden cosas tan extrañas como que fondos europeos se están aplicando en innovación en Estados Unidos, como nos explicaba Bill Gates en una reciente conferencia", expuso Fernando Silva.

"Europa se ha volcado a la defensa de los ciudadanos, pero parece que lo ha hecho en contraposición de las empresas. Si Europa quiere ser fuerte tiene que tener empresas fuertes. Mirad el ejemplo de Telefónica era un monstruo con una valoración enorme. En Europa hay 80 operadores y en Estados Unidos hay solo tres", comparó Riberas.

Caminar hacia un mercado único es la solución que vislumbran los ponentes. "La fragmentación del mercado dificulta la capacidad de innovar. Intentamos ofrecer las mejores soluciones para el cliente, pero encontramos barreras nacionales en las que tenemos que sobreponernos a vigilancias locales muy exigentes. Eso hace que tengamos más difícil alcanzar el tamaño de nuestros peers internacionales", comentó Antonio Huertas. Y añadió: "Nos hemos sobrepuesto a las dificultades de supervisión y las características de los diferentes mercados, pero por ello estamos limitados a buscar nuevas soluciones en campos como, por ejemplo, la Inteligencia Artificial".