El gigante del mármol y granito Levantina anuncia un ERE para 244 empleos, el 30% de su plantilla
- El recorte se centra en sus plantas y canteras en Novelda y Pinoso (Alicante)
- Tras varias reestructuraciones, está en manos del fondo Bybrook y JP Morgan
- El grupo acumula pérdidas de 85 millones entre 2019 y 2022
Ángel C. Álvarez
Valencia,
Nuevo golpe para el mayor productor y exportador de piedra natural de España, el grupo Levantina. La empresa ha anunciado el inicio de las negociaciones de un expediente de regulación de empleo (ERE) con el que pretende formalizar la salida de 244 trabajadores de la compañía, alrededor del 30% de la plantilla que posee en toda España.
Levantina está en manos del fondo Bybrook y de JP Morgan, que controlan la mayoría de la compañía después de varios procesos de refinanciación y reestructuración de la firma tras prolongar durante años su delicada situación financiera.
En su comunicado, la compañía proveedora del sector constructor e inmobiliario justifica la medida en causas económicas, organizativas y de producción y para "garantizar su viabilidad futura".
El nuevo ajuste será un auténtico hachazo para la actividad del grupo en la que ha sido la base histórica de su actividad: la comarca del Vinalopó en Alicante donde explota la mayor cantera del mundo de la variedad denominada crema alicante y se asientan sus factorías de transformación desde que arrancó su actividad, según la información que ha trascendido.
Según fuentes del comité de empresa, las cifras planteadas suponen el 75 por ciento de los trabajadores de la factoría de Novelda (Alicante) y la mitad de la plantilla cantera del Monte Coto, situada en la localidad alicantina de Pinoso, según recoge Europa Press.
De ejecutarse el ERE, podrían perder su puesto 157 empleados de la fábrica, de un total de 208, con lo que solo quedarían 51 profesionales en las instalaciones; otras 77 que trabajan en la explotación minera a cielo abierto de Pinoso, donde hasta la fecha hay 132 empleados, y también afectaría a diez personas de la cantera de Losares (Albacete) y a otras cuatro de la de Vallanca (Valencia). Levantina también cuenta con explotaciones de granito en Galicia, además de filiales tanto de extracción como comercializadoras en más de una decena de países.
Giro en busca de la rentabilidad
El grupo controlado por los fondos internacionales tras asumir su deuda apostó por el segmento de la piedra sinterizada, que supone la fabricación de superficies a partir de compuestos minerales en un proceso industrial similar al cerámico y que ya realizaba su división Techlam. Para ello invirtió 50 millones de euros en una planta en Castellón.
Precisamente la compañía explica que el ERE forma parte de su estrategia para "reestructurar sus divisiones de minería y mármol, con el objetivo de adaptar la organización a las actuales demandas del mercado y garantizar su viabilidad futura".
La empresa ha subrayado que "los esfuerzos del grupo se centrarán en la adecuación de su capacidad productiva actual y el consiguiente reajuste de su estrategia comercial para asegurar así la rentabilidad de todas sus unidades operativas".
En 2022, último ejercicio con las cuentas anuales en el Registro Mercantil, el grupo registró pérdidas por 15,5 millones de euros. Una cifra que si se suma las de los años anteriores supera los 85 millones de euros de 'números rojos' entre 2019 y 2022.