Industria

La junta de Cementos Molins votará sobre la posibilidad de saltar al continuo

  • Lo ha propuesto la rama familiar que se opuso al cambio de sede a Madrid
  • El consejo de administración defiende convocar junta extraordinaria si una gran compra requiere dar ese paso
Fábrica de Cementos Molins. EE

Estela López

La junta de accionistas de Cementos Molins, convocada para finales de mes, votará sobre la delegación en el consejo de administración para solicitar la admisión a negociación de las acciones de la sociedad en las Bolsas de Valores de Madrid, Bilbao y Valencia, así como su inclusión en el Sistema de Interconexión Bursátil Español (Mercado Continuo).

Dicho punto se ha añadido a petición del accionista Noumea, que aglutina la participación del 31,6% de la rama familiar Molins Amat (la del presidente del grupo, Juan Molins, que no opina igual que sus familiares díscolos), y que en el pasado ya propuso sin éxito el retorno de la sede de la compañía cementera a Cataluña, después de que en 2017 se trasladase el domicilio social a Madrid por el procés (movimiento que también impugnaron).

Esta vez, Noumea también ha agregado al orden de día de la junta votar la delegación en el consejo de administración, por el plazo de cinco años, de la facultad de aumentar el capital hasta la mitad del importe nominal del capital social en la fecha de la autorización, según consta en la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).

La junta de Cementos Molins ya autorizó estas dos posibilidades de ampliar capital y saltar al continuo en 2018 y por cinco años, por lo que el plazo expira ahora, pero el consejo de administración aboga actualmente por seguir las nuevas recomendaciones de buen gobierno y, si aparece una gran operación corporativa que requiera estos instrumentos, consultar a los accionistas sobre dicho caso concreto para contar con su aprobación.

Para ello serviría otro punto del orden del día ya comunicado en mayo: la autorización para convocar una junta general extraordinaria de accionistas de la sociedad con una antelación mínima de 15 días.

Cementos Molins cotiza en corros desde los años 40, pero Noumea ha llevado a votación en las juntas anuales de 2021 y 2022 la petición directa de salto al continuo, aunque fue rechazado, porque desde la dirección de Cementos Molins argumentan que solo tiene sentido si se presenta una gran operación corporativa "transformacional" que requiera un importante endeudamiento.

El grupo está muy activo en compras. Solo en 2021 firmó cinco operaciones nacionales e internacionales por valor de 230 millones, pero pese a ello mantiene un nivel de endeudamiento muy bajo, de 108 millones a 31 de marzo de 2023, 0,4 veces ebitda.

Su última operación de crecimiento inorgánico la anunció este abril, y fue la compra de la empresa barcelonesa de fabricación y distribución de productos químicos para pavimentos industriales y decorativos Tecnoresil.