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La oposición se niega al gobierno de unidad propuesto por Al Assad

    Bashar al Assad, presidente sirio. <i>Imagen: Reuters</i>

    EFE , Reuters

    La oposición siria ha rechazado la oferta de un gobierno de unidad que este miércoles había planteado el presidente, Bashar al Assad, y ha insistido en que es necesario crear una administración de transición con plenos poderes ejecutivos.

    El Alto Comité para las Negociaciones (HNC), la principal representación opositora en dicho diálogo, ha descartado la oferta del régimen. "El Gobierno, sea nuevo o viejo, no es parte del proceso político mientras esté presente Bashar al Assad", ha advertido el negociador George Sabra.

    "Lo que cuenta Bashar al Assad no tiene relación con el proceso político", ha añadido, en alusión a las conversaciones de Ginebra, auspiciadas por Naciones Unidas.

    Otro miembro de la delegación opositora, Assad al Zoubi, también ha insistido en que quieren un órgano "transicional" con "plenos poderes ejecutivos", también los que corresponderían a la "autoridad presidencial". Lo que quiere el régimen, ha advertido, es un "gobierno participativo".

    Al Assad lo ve factible

    El presidente sirio, Bashar al Assad, había creído factible este miércoles la formación de un Gobierno de unidad nacional que incluya a la oposición y cuya principal misión sea la elaboración de una nueva Constitución.

    En una entrevista concedida a la agencia rusa RIA Novosti, Al Assad ha considerado que la formación de dicho gobierno podría acordarse en el marco de las conversaciones de paz de Ginebra, cuya siguiente ronda está prevista para el 10 de abril.

    El presidente sirio ha dejado claro que cualquier transición debe enmarcarse en la actual Constitución del país, incidiendo en que la noción de periodo de transición "no existe".

    "El periodo de transición debe inscribirse en la Constitución actual y adoptaremos una nueva después de que la vote el pueblo sirio", ha explicado, aclarando que antes de que llegue este momento "podemos ocuparnos del Gobierno".

    "El organismo de transición o lo que determina el formato de la transición es un Gobierno formado por diferentes fuerzas políticas sirias: opositoras, independientes, pertenecientes al Gobierno actual y otras", ha puntualizado.

    El principal objetivo de este Gobierno sería, ha añadido, "elaborar una Constitución, luego presentarla a los sirios para que la voten y más tarde asegurar el traspaso a la nueva Carta Magna". "Por lo tanto, la solución consiste en crear un Gobierno de unidad nacional que elaborará la nueva Constitución", ha resumido.

    En opinión de Al Assad, el formato de un nuevo Gobierno sirio se debe acordar en Ginebra. "El objetivo de las negociaciones de Ginebra consiste en acordar el formato de este Gobierno mediante el diálogo intersirio".

    El presidente ha reconocido que no todas las partes sirias aceptan esta decisión pero "algunos ya están de acuerdo". "Cuando todos aprobemos esta idea diremos cómo se llevará a la práctica", ha añadido, afirmando que lo lógico sería que en él estuvieran "presentes las fuerzas independientes, de la oposición, y las fuerzas leales al Estado".

    Asimismo, ha precisado que el actual Parlamento "no desempeñará ningún papel en este proceso que llevaremos a cabo nosotros y la oposición desde el extranjero". "El Consejo Popular controla el trabajo del Gobierno pero en Siria no lo nombra", ha explicado.

    Acusa a Francia y Reino Unido

    "Francia, Reino Unido y otros países occidentales, además de Turquía y Arabia Saudí, apoyan directamente al terrorismo que opera en Siria e Irak", ha dicho Al Assad, en la entrevista.

    "El terrorismo es un problema de todos. Es apoyado directamente por Turquía, por la familia real de Arabia Saudí, y por una parte de los Estados occidentales, sobre todo Francia y Reino Unido", dijo Asad.

    El resto de los países occidentales, agregó el líder sirio, "observan, sin emprender nada serio" para solucionar el problema.

    La guerra cuesta "200.000 millones"

    El presidente sirio ha cifrado en más de 200.000 millones de dólares los daños causados por los más de cinco años de guerra civil en Siria: "El daño económico y a la infraestructura supera los 200.000 millones de dólares".

    Según el presidente sirio, "las cuestiones económicas se pueden arreglar cuando se estabilice la situación en Siria, pero la reconstrucción de la infraestructura requiere mucho tiempo". En este sentido, ha señalado que Damasco espera contar con la ayuda de Rusia, China e Irán.

    Al Assad también se ha referido al problema de los refugiados sirios, subrayando que la migración ha venido provocada no solo por la falta de seguridad en el país sino también por las sanciones impuestas contra Siria por Occidente y se ha mostrado convencido de que regresarán una vez haya esperanzas de una mejora de la situación del país.