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¿Por qué vuelve a crecer la morosidad pública?


    J. R. Pin Arboledas

    La morosidad bancaria se acerca a cifras razonables. Sin embargo, las Administraciones Públicas vuelven a alargar sus plazos de pago. En la crisis muchas empresas y autónomos quebraron porque ayuntamientos y autonomías les pagaban tarde y mal, agravando el desempleo. 

    Para evitar este cáncer económico la ley 15/2010 estableció para las Administraciones plazos de 50 días de pago a partir de la entrega del producto o ejecución del servicio en 2011, 40 días en 2012 y 30 días a partir del 2013.

    Además, el Ministerio de Hacienda aprobó los créditos de 'Pagos a Proveedores' y el FLA (Fondo de Liquidez Autonómica) para acabar con la funesta práctica de "meter las facturas en el cajón". Con eso y la concienciación de los gestores públicos, el plazo de pago se redujo.

    Los plazos han vuelto a crecer

    Pero en mayo de 2015 muchos de estos dirigentes cambiaron y los plazos de pago han vuelto a crecer. Las autonomías, que en junio de 2015 habían reducido a 40 días su plazo medio de pago, lo tenían en diciembre en 61 días.

    El cambio de mandatarios y la falta de autoridad en el Gobierno de la Nación, que afloja su rigor en periodos electorales, y no digamos en las épocas de "en funciones", están llevándonos nuevamente al relajo. Vuelta a utilizar el "crédito de proveedores" que es el más socorrido de todos.

    El proveedor, si quiere seguir siéndolo, no puede ejercer sus derechos de manera judicial. Y eso no es bueno; algunos quiebran y crean desempleo. Si las Administraciones son las primeras en saltarse la ley ¿dónde está la seguridad jurídica en el tráfico mercantil? Los medios de comunicación avisan de estos temas en las páginas especializadas.

    Resulta mucho más espectacular hablar de los excesos de los titiriteros carmenalianos; y deben ser denunciados. Pero también hay que dar relevancia a estas prácticas en las portadas, porque reflejan la ineptitud gestora y la insensatez de algunos responsables de los dineros de todos los españoles.