Evasión

En ruta por Ibiza: descubrimos el restaurante coqueto de la hija del fundador de Pachá en una preciosa finca payesa

Aguamadera, en Ibiza

Informalia

En una colina al noreste de Ibiza, rodeado de bancales, pinares y campos de cultivo, se alza Aguamadera, un hotel de agroturismo que recupera el alma de una antigua finca payesa del siglo XIX. Su arquitectura original, restaurada con respeto y sensibilidad, acoge hoy un proyecto que entrelaza hospitalidad, paisaje, cultura local y cocina de leña en una propuesta íntima y profundamente conectada con la tierra. Detrás del proyecto está Iria Urgell, hija de Ricardo Urgell, fundador de Pachá, que da forma a un concepto ligado a la esencia de la isla.

Aguamadera nace como un refugio sereno en el corazón de Ibiza por el amor a la gastronomía, la tradición y el paisaje. "Aguamadera es casa. Desde el corazón de Ibiza, reúno a una comunidad creativa de almas para compartir experiencias y amor por la cultura, la gastronomía, la naturaleza y la tradición de la isla", afirma Urgell.

Un diseño minimalista, terrazas privadas y chimeneas. Todo gira en torno a una piscina central, jardines de hierbas y huertos ecológicos que invitan a reconectar con la naturaleza. Se ha respetado la estructura heredada, sin alterar los volúmenes originales, manteniendo la arquitectura propia de la finca ibicenca. Vemos mobiliario rústico del Empordà y una singular selección de piezas decorativas, arte y cultura local realizados por la propietaria. El hotel dispone de 12 habitaciones, distribuidas entre la finca y los antiguos corrales, que conservan la estructura payesa original y que han sido transformados en cuatro suites y una habitación.

Restaurante de leña

El chef ejecutivo Gonzalo Cerrato Laguna, con una trayectoria profesional que se extiende de Londres a México, retoma los fundamentos de la cocina mediterránea a través del dominio del fuego y la cocina de leña. En el centro de su propuesta se sitúan la simplicidad, la pureza y la conexión con los orígenes, siempre con productos locales. "La cocina es mi pista de baile, y el huerto de Aguamadera me provoca cada temporada con sus joyas para crear una carta de buen producto, poco tratado y con respeto a la tradición", afirma. "Anhelamos despojarnos de todo para revelar la esencia de quienes realmente somos. Buscamos una sinergia entre ingredientes, cocina y presentación, despertando ese espíritu de reconexión con la Tierra, los elementos y la gente". Durante el día, el entorno ofrece la paz de los sonidos más puros del campo; al atardecer, se encienden las velas y el hilo musical se tiñe de soul y jazz.

Con más de 2.800 m² de bancales agrícolas y 1.330 m² de jardines, la finca payesa está rodeada de hortalizas, frutas, plantas medicinales y flores que abastecen y embellecen el entorno del hotel, favorecen la polinización y fortalecen la salud de las abejas gracias a la diversidad de plantas y flores. Dirección: de Jesús a Cala Llonga Km. 7.5, Santa Eulària D'es Riu (Ibiza).