Evasión

La receta con un bote de garbanzos que más he repetido este año: lista en 20 minutos y rica en proteínas

Fuente: Getty Images

María León

Aunque queda poco para la llegada de la primavera, el tiempo de estos últimos días no se corresponde. Frío, lluvia, cielos encapotados, todas estas características hacen que nuestro cuerpo todavía nos siga pidiendo platos de cuchara calentitos, que sean reconfortantes y que estén ricos. Las expertas en eso son nuestras abuelas y madres, que parecen tener un amplio recetario en sus cabezas y una mano especial en la cocina.

Aunque en la actualidad no dispongamos del mismo tiempo para dedicárselo a los fogones, eso no significa que tengamos que renunciar a este tipo de recetas. Es aquí donde entran en juego algunos recursos como las legumbres en bote, muy útiles sobre todo cuando vamos justos de tiempo y que nunca faltan en la despensa.

Una fuente de proteínas

Esta receta es una versión exprés y más saludable de los guisos y potajes que nos preparaban nuestras abuelas. Además, también es más sencillo, ya que no lleva muchos ingredientes y no necesita ser muy habilidoso en la cocina. Otra de las grandes ventajas de este plato de cuchara es que los ingredientes no son imprescindibles, ya que varios de ellos pueden ser sustituidos fácilmente por otros. Sin duda, el secreto está en las especias, dicho de otro modo, en los condimentos que utilicemos y el sabor que queramos darle.

Además, en menos de media hora conseguimos un plato repleto de proteínas y excelente desde el punto de vista nutricional. Los garbanzos, junto al pollo y algunas hortalizas, es una mezcla ideal para el mantenimiento muscular y repleta de vitaminas y antioxidantes.

| Fuente: Istock

El paso a paso

Ingredientes:

  • 1 bote de garbanzos cocidos. 400 g
  • 1 pechuga de pollo
  • 1 cebolla
  • 1 pimiento verde o rojo
  • 1 zanahoria
  • 200 g de tomate fresco o triturado
  • 500 ml de caldo de verduras
  • 2 dientes de ajo
  • 2 hojas de laurel
  • 1 cucharadita de pimentón
  • 1/2 cucharadita de comino
  • Sal y pimienta al gusto

Preparación:

  1. Pela y corta todas las verduras, la cebolla, el pimiento y la zanahoria, en trozos pequeños. De igual forma, lamina los dientes de ajo y corta la pechuga de pollo en dados también. +
  2. Calienta una sartén grande con un chorrito de aceite de oliva. Añade la cebolla y los ajos y sofríe.
  3. Cuando estén dorados, añade el pimiento y la zanahoria y cocina durante unos 5 minutos. No te olvides de remover de vez en cuando.
  4. Incorpora el pollo troceado. Salpimienta al gusto y dora durante un par de minutos.
  5. Agrega el comino y el pimentón. Deberás remover con movimientos rápidos para que no se queme. Inmediatamente, añade el tomate triturado y deja cocinar durante otros 5 minutos hasta que se reduzca el agua del tomate.
  6. Incorpora los garbanzos, las hojas de laurel y cubre con el caldo de verduras. Lleva a ebullición, después baja el fuego y deja cocinar durante unos 5-10 minutos más.