Evasión

El pueblo catalán más bonito del mundo según la Organización Mundial de Turismo

Rupit i Pruit /Foto: iStock

Víctor Ruiz

España es un país repleto de pueblos impresionantes que se convierten en destinos muy especiales para hacer una escapada. Como todos los años, en estas fechas son muchas las organizaciones que se encargan de nombrar aquellos lugares más bonitos en los que se integra la naturaleza con un desarrollo sostenible. La Organización Mundial de Turismo (OMT) ha declarado que el pueblo más bonito del mundo está en Cataluña, concretamente en una pequeña localidad de la provincia de Barcelona.

Se trata de Rupit i Pruit, en la comarca barcelonesa del Osona. Un pueblo que ha sobresalido por su impresionante paisaje montañoso y la conservación de su patrimonio. Y es este compromiso con el desarrollo sostenible el que le ha valido este título con prácticas innovadoras que promueven un turismo responsable con el medio ambiente.

Desde la propia página web del ayuntamiento de Rupit i Pruit se da una serie de pautas a los visitantes con el objetivo de que todos contribuyan a crear un modelo más consciente y respetuoso con la naturaleza.

A una hora y media de Barcelona, este pueblo presenta una estampa ideal para hacer una escapada y disfrutar tanto de los espacios naturales como del patrimonio de su casco histórico.

Lo primero que llama de Rupit i Pruit es la labor de conservación que se ha hecho en este pueblo de carácter medieval con casas de piedra y calles empedradas. Sin lugar a dudas, el primer punto en el que la gente se para es su puente colgante de madera, una estructura que conecta el casco antiguo con el resto del pueblo. Al otro lado, el casco histórico invita a pasear por callejones sinuosos que desembocan en plazas como la de la iglesia de San Miquel, un templo barroco con un campanario que destaca sobre el conjunto urbano.

El entorno natural de Rupit i Pruit es igualmente de impresionante. Las rutas de senderismo llevan a lugares como el Salto de Sallent, una espectacular cascada de más de 100 metros de altura, especialmente impresionante en épocas de lluvia. El camino hacia la cascada permite disfrutar de paisajes de bosques y acantilados típicos de la zona. Otro punto de interés es el mirador de El Far, que ofrece vistas panorámicas sobre la comarca.

Rupit i Pruit /Foto: iStock