Energía

Alfonso Ortal, CEO de Verdian: "Queremos alcanzar una capacidad total instalada de 3 GW en solar y baterías a finales de esta década"

  • "Estamos definiendo un plan estratégico para empezar a expandir, crecer y consolidarnos"
  • "Este año vamos a tener en 'Ready to Build' un mínimo de 150 MW entre Italia y España para tener operativos en 2026"
  • "Las baterías dan estabilidad al sistema, pero la red de transporte debe adaptarse para adecuar la integración de renovables"
Alfonso Ortal, CEO de Verdian. Imagen: A. Morales

Rubén Esteller, Concha Raso

Alfonso Ortal acaba de aterrizar en Verdian. Su amplia experiencia en el sector le avala para consolidar a la compañía como líder europeo en generación de energía renovable. Presentes en España e Italia, uno de sus principales retos es expandir la empresa a otros mercados europeos con alta volatilidad y estabilidad regulatoria.

¿A qué se dedica Verdian y qué objetivos se han marcado para los próximos años?

Verdian es un productor independiente de energía, dedicado al desarrollo, construcción y operación de proyectos renovables. Somos propiedad del Fondo 4 de Energía Limpia de Nuveen Infraestructure, uno de los mayores gestores de fondos de renovables de Europa. Actualmente tenemos un pipeline de unos 2 GW en desarrollo en Italia y España, tanto en proyectos de solar fotovoltaica como de almacenamiento con baterías, con un tamaño medio por planta de entre 50 y 100 MW. El 80% de los activos en desarrollo están en Italia y el 20% en España, aunque a nivel tecnológico la cosa está equilibrada, con una proporción del 50% en ambos países, tanto en solar como en baterías. Nuestro objetivo es alcanzar una capacidad total instalada de 3 GW a finales de esta década, así como expandirnos a otros mercados europeos con alta volatilidad, gran penetración de renovables y buena estabilidad regulatoria. Asimismo, también estamos evaluando distintas opciones de crecimiento y no descartamos, por ejemplo, la generación distribuida.

Electrificar la demanda no es tarea fácil, ¿qué hay que hacer para avanzar por este camino?

Si queremos alcanzar los objetivos de descarbonización y completar la transición energética necesitamos más renovables y, para eso, hace falta gestión flexible. A nivel mercado existen distintas palancas de gestión de integración de renovables. Una de ellas es la electrificación de la demanda, que supone una oportunidad muy buena de industrialización o reindustrialización en Europa, donde tecnologías avanzadas de almacenamiento, como las baterías, serán clave para equilibrar la oferta y la demanda. Un claro ejemplo es California, que abogó por una penetración de renovables, sobre todo de solar, pero donde también implementaron soluciones flexibles como las baterías, que dieran accesibilidad y estabilidad al sistema. Tenemos otras muchas soluciones de flexibilidad, como los ciclos combinados, generación convencional, hidráulica, pero la batería va a representar, desde nuestro punto de vista, el mayor elemento de disrupción en cuanto al nuevo paradigma de los mercados y, por ello, nuestro posicionamiento está muy centrado en mercados que tienen buenos fundamentos para la batería.

Entonces, ¿el foco de inversión de Verdian va a estar centrado en baterías?

Enfocarse en una sola tecnología tiene riesgos, por eso queremos crear portfolios mixtos. Este tipo de proyectos favorecen la integración eficiente de renovables, al mismo tiempo que tienen eficiencia de costes por el tema de la colocación. Nosotros no tenemos puesto el foco solo en baterías. Como he comentado antes, estamos en un 50%-50% en cuanto a desarrollo, pero la idea es tener ese portfolio diversificado flexible, multitecnológico.

¿Qué diferencias hay entre el mercado italiano y el español?

Italia es un caso de aplicación de regulación rápida. Ha sacado unas subastas que crean las condiciones para atraer inversión con unos retornos mínimos para favorecer la construcción e integración de baterías en el sistema y, al mismo tiempo, tienen subastas también para solar y eólica. Esto convierte a Italia en un mercado muy atractivo. Por otro lado, y en líneas generales, el coste de la batería sigue reduciéndose por la curva de aprendizaje y cuando entren muchos proyectos de baterías habrá que ver cuál es la capacidad que tienen de absorber valor y que no haya canibalización. Ahora mismo no vamos a un mercado donde haya menor volatilidad de precio, vamos a un mercado donde la necesidad ya ingente es de flexibilidad. Y compaginar esa necesidad de flexibilidad con los objetivos de descarbonización de un país es complejo. Lo que tenemos que hacer es ver dónde queremos estar en cuanto a penetración de renovables y cuánto se va a construir en redes, porque las baterías ayudan a dar estabilidad al sistema, pero el propio sistema y la propia red de transporte tienen que adaptarse para adecuar la integración de renovables. En Alemania, por ejemplo, tienen que pasar de construir 400 kilómetros de red al año a 2.000 kilómetros. Yo creo que en España se están haciendo las cosas con la intención de favorecer y aumentar los presupuestos que se dedican al desarrollo de redes. Al final, hay que ver dónde queremos estar en 2030, qué objetivos tenemos y cómo vamos a llegar, porque estamos en un momento increíblemente interesante para inversiones en renovables. La oportunidad está ahí, los fundamentos están ahí, el camino de descarbonización es imparable, la electrificación de la demanda es imparable, podemos hablar de cómo de rápido o cómo de lento, pero en Europa estamos en un momento de vital importancia y de un posicionamiento muy fuerte con el resto del mundo y España es un caso de éxito de adopción de renovables.

¿De qué manera puede afectar a sus planes de inversión el freno del presidente de EEUU al desarrollo de renovables?

Somos conscientes de que se están produciendo cambios geopolíticos muy importantes, pero creo que todo lo que está pasando va a crear mayor oportunidad para Europa, para posicionarnos de forma más fuerte y no perder la carrera con Asia. He trabajado muchos años en EEUU y creo que la industria de renovables va a seguir desarrollándose. Quizá tendrá que convivir con otros diseños de regulación y otras fuerzas en el mercado, pero eso puede abrir una puerta de oportunidad para un posicionamiento fuerte y para que grandes players que están en este país puedan reubicar su estrategia de inversión.

¿Tienen fecha para la primera decisión de inversión?

Este año vamos a tener proyectos en Ready to Build. Diría que un mínimo de 150 MW entre España y Italia para tener operativos en 2026. Actualmente estamos definiendo la estrategia de financiación para definir ese camino, a medio o largo plazo, muy alineados con Nuveen, que es un socio fundamental y con un respaldo fuerte. Otro de los elementos de la estrategia que valoramos es cómo vamos a sacar más valor para nuestros inversores de nuestros activos.

¿Tienen definida alguna estrategia de contratos PPA o Contratos por Diferencia para la venta de energía?

Es un tema que tenemos en el radar, pero es pronto para hablar de ello. La estrategia PPA depende mucho de los mercados, porque puedes monetizar un activo de distintas formas. Lo que sí estamos definiendo es un plan estratégico para empezar a expandir, crecer y consolidarnos.

¿Tienen una cantidad de capital previsto o va a depender un poco del nivel de avance?

Es difícil dar una cifra porque primero va a haber equity de Nuveen y también financiación externa. En segundo lugar, de los 3 GW que tenemos de objetivo, una parte quizá sea en desarrollo y eso va a definir mucho el valor. Pero lo estamos mirando, porque parte del ejercicio estratégico es decir dónde queremos estar, en qué tiempo, cuánto y dónde.

¿Van a firmar algún tipo de acuerdo con algún proveedor?

Por lo que se refiere a la parte de proveedores, vamos a valorar en qué momento y cómo tiene sentido apalancarnos en acuerdos de esa envergadura. Estos acuerdos crean valor para las dos partes y es una buena práctica, pero nosotros tenemos nuestro propio camino y lo evaluaremos en su justa medida. Verdian quiere jugar un papel de acompañar a nuestros propios empleados, inversionistas y partners en el camino de la transición energética. También hacia las comunidades, porque el tema de crear valor en una comunidad, más allá del proyecto renovable, para nosotros es fundamental. Lo que queremos es explorar opciones de financiación de comunidad (community funding), para crear ese valor integral de generación limpia, no solo con la creación directa e indirecta de puestos de trabajo, sino también participando en el propio desarrollo de la comunidad. Los proyectos van a estar ahí para mucho tiempo y hay que buscar la forma de beneficiar a la comunidad por tener un proyecto. La realidad es que los proyectos vierten a la red y favorecen la reducción de precios a nivel país. Estamos hablando de proyectos que desarrollamos mayormente muy lejos de la zona de macropoblación, zonas urbanas, y va muy con la tesis de creación de valor que queremos.