Energía
La creación de dos mercados para diferentes tipos de energía podría ser la solución a la crisis
- La Universidad de Oxford aboga por el diseño de un mercado eléctrico "a demanda" y otro "según disponibilidad", para productores y consumidores
Alba Pérez
Madrid,
Los últimos meses han demostrado que los mercados de la electricidad están rotos y ya no cumplen su principal cometido de dar señales adecuadas a productores y consumidores. Partiendo de la base de que el problema se encuentra en una combinación de cambios tecnológicos (de centrales con costes marginales a centrales con costes de capital) y de políticas que socavan las estructuras tradicionales del mercado, el Instituto de Estudios Energéticos de la Universidad de Oxford ha presentado un estudio que defiende la creación de dos mercados separados para diferentes tipos de energía: "a demanda" y "según disponibilidad" tanto en el extremo del productor como en el del consumidor.
El análisis propone un nuevo enfoque para el diseño del mercado que permita dar cabida a las fuentes renovables intermitentes; mantener la fiabilidad general del sistema al tiempo que permite a los consumidores dar valor a su propia seguridad de suministro; proporcionar señales claras a los generadores para la inversión y el funcionamiento; y proporcionar una estrategia de salida que permita que la intervención del gobierno se limite a largo plazo a la fijación de las condiciones marco. "Ninguna otra propuesta presentada hasta la fecha puede cumplir todos estos objetivos", defienden los autores.
En el caso de los productores, las centrales de generación eléctrica despachable (que pueden ser utilizadas a demanda) operarían en el mercado "a la carta" o flexible, y se despacharían "según el orden de mérito cuando sea necesario". Esta energía se pagaría en términos generales sobre la base actual. En el caso de las centrales intermitentes (donde la energía no está disponible continuamente para su conversión en electricidad y control directo externo) participarían en el mercado "según disponibilidad". En principio, el informe plantea que estas plantas funcionarían según disponibilidad y, al menos inicialmente, "se les pagaría un precio que reflejara el coste nivelado de la electricidad de la fuente concreta", que se fijaría normalmente a través subastas en la fase de inversión.
"La idea es que los diferentes costes y el funcionamiento de las fuentes disponibles y bajo demanda también se reflejen en el mercado minorista". En este sistema, los consumidores podrán elegir entre la energía "a la carta" o la "disponible", con lecturas de contador separadas, o una combinación de las dos fuentes.
Para este modelo es muy probable que en un primer momento se necesite un apoyo a los precios, ya sea a nivel de los productores o de los consumidores, para que la oferta "a la carta" resulte atractiva para los consumidores. Con el tiempo, sin embargo, a medida que los precios del carbono aumentasen y los costes de renovables disminuyesen, el apoyo podría eliminarse.
Principios
El enfoque de dos mercados podría adoptar en la práctica muchas formas. Sin embargo, los autores del informe plantean cuatro principios subyacentes "esenciales para el concepto tal y como se presenta". A nivel mayorista, los expertos abogan por la separación económica de los mercados para que las centrales intermitentes de bajo y nulo coste marginal que reciban ayudas de fuentes ajenas al mercado no creen "externalidades pecuniarias" para las centrales flexibles con costes marginales significativos. Además, consideran esencial que existan señales de precios en ambos mercados capaces de remunerar la inversión y orientar el funcionamiento.
En el caso de la venta al por menor, plantean la necesidad de separar la oferta al consumidor entre las opciones "según disponibilidad" y "bajo demanda" y la importancia de una transferencia de costes de los dos mercados mayoristas a través de las dos ofertas separada.