La junta de Dia rechaza la gestión del consejo y sus remuneraciones

La junta de accionistas de Dia ha rechazado la gestión llevada a cabo por el consejo de adminitración de la compañía, que encabeza Borja de la Cierva como primer ejecutivo de la empresa, el informe de remuneraciones del año pasado, la reelección de Miguel Ángel Peinado como consejero ejecutivo y la reelección de KPMG como auditor, que ha sido sustituido por EY, además de votar en contra también de la ampliación de capital de 600 millones de euros propuesta por el consejo de administración, así como de la reducción del mismo para llevar a cabo una operación acordeón con la que restablecer el equilibrio patrimonial y evitar que la compañía entre en causa de disolución

El rechazo de LetterOne, el primer accionista de la cadena de supermercados con un 29 por ciento del capital, ha sido clave en todas estas votaciones, después de que cuestionara ya en varias ocasiones el gobierno corporativo de la sociedad y exigiera cambios en el consejo de administración.

"El éxito del plan de transformación de DIA requerirá un fuerte liderazgo, un buen gobierno y una estructura de capital viable a largo plazo, riesgos que L1 Retail (la filial de distribución de LetterOne) está dispuesto a asumir durante la implementación de su plan de transformación a cinco años", explica el brazo inversor de Mikjial Fridman. 

El consejo de administración queda compuesto ahora por diez miembros. De él forman parte Richard Golding, como vicepresidente primero; Mariano Martín, como vicepresidente segundo; Borja de la Cierva como consejero delegado y Julián Díaz, Ángela Spindler, Antonio Urcelay, María Garaña y Jaime García-Legaz como vocales. Quedan pendientes dos puestos, que en teoría, correspondería nombrar a LetterOne.

El informe de remuneraciones correspondiente al último ejercicio, ahora rechazado, aunque sin efectos prácticos, fijaba las indemnizaciones a Ricardo Currás y Antonio Cobo como exconsejeros delegados. Este rechazo se produce a pesar de que la propia empresa ha anunciado ya que a reclamará a Currás que devuelva 2,4 millones de la retribución recibida en los tres últimos años tras detectarse irregularidades contables.

En la remuneración del año pasado, que se eleva a un total de 2,56 millones, no aparece ningún pago variable, al haber salido antes del 31 de diciembre, pero sí la indemnización por su despido el 24 de agosto de 1,6 millones. Currás, que cobró un sueldo de 486.806 euros, tiene derecho, igualmente, a un pago de 600.000 euros por una cláusula de no competencia.

A pesar de todo, LetterOne mantiene abierta la puerta para seguir negociando con el equipo gestor y con la banca para evitar el concurso de acreedores y lograr que la opa que ha lanzado a 0,67 euros por acción tenga éxito. "L1 Retail seguirá colaborando con el consejo de administración de Dia y con todos los stakeholders para garantizar el éxito de su opa y la viabilidad a largo plazo de la compañía", asegura LetterOne.

Negociación

Si bien su oferta no está condicionada a que se llegue a un acuerdo previo con los acreedores, LetterOne asegura que "continuará participando de manera equilibrada y justa en la búsqueda de un acuerdo sobre una estructura de capital viable a largo plazo para la sociedad".

En la misma línea también, el consejo aseguró en un comunicado que "se encuentra a disposición de las partes y continuará trabajando con el accionista L1 Retail., las entidades financieras y sus asesores respectivos para, con la máxima celeridad posible a la luz de los exigentes plazos a los que se enfrenta, cumplimentar aquellos de los requisitos que competan o estén bajo el control de la sociedad".