Empresas y finanzas

BBVA toma el 12% de la mayor 'teleco' turca por el impago de las deudas

  • Las expectativas del banco en el país otomano empeoran para 2019
Garanti, la filial turca de BBVA. <i>Foto: Archivo</i>.

Fernando Tadeo

BBVA se ha convertido en el tercer mayor accionista de la principal operadora de telecomunicaciones turca. La entidad, a través de su filial Garanti, ostentará un 12% de Turk Telekom como consecuencia del plan de reestructuración de la deuda de Ojer, compañía en manos de la familia libanesa Hariri, que poseía el 55% de la empresa de telefonía otomana.

Según el plan definitivo aprobado ya por la banca acreedora y por el Gobierno de Erdogan, las entidades se harán cargo de este porcentaje del capital a través de un vehículo de nueva creación, Yapilandirma Yönetimi, que reclamará a las autoridades del país no tener que lanzar una oferta pública de compra por las acciones restantes.

Desde hace dos años, las entidades, entre ellas Garanti y la familia libanesa, llevaban negociando la reestructuración ante la imposibilidad de pago de una línea de créditos de unos 4.000 millones de euros. Del total, unos 850 millones habían sido concedidos por la franquicia de BBVA.

La filial del grupo que presidirá desde enero Carlos Torres tiene un 22,12% del vehículo formado por la banca. De esta manera, el porcentaje indirecto que controla Garanti de Turk Telekom es del 12,1%. El Estado otomano se ha convertido en el principal socio de la operadora, con un 25%, y otro 6,7% a través del fondo soberano. Por su parte, Akbank tiene en torno a un 17%, mientras que Isbank controla un 6%.

La intención de los bancos es desprenderse lo más rápido posible de la compañía de telecomunicaciones, que en la actualidad tiene un valor bursátil de apenas 2.300 millones de euros.

La situación por la que ha atravesado la familia libanesa se ha generalizado en el tejido empresarial del país y en la inversores que han apostado por este mercado, a raíz de la crisis que se ha agudizado este verano y que está obligando a la banca a tener que afrontar planes de rescate y de reestructuración financiera de sus clientes, principalmente por las deudas en moneda extranjera. Así, por ejemplo, el socio turco de BBVA, el grupo Dogus, ha tenido que desprenderse recientemente de la cadena de hoteles que había ido construyendo en los años de bonanza, entre ellos, el emblemático Villa Magma de Madrid.

También BBVA ha tenido que ejecutar en los últimos meses algunos activos de sus clientes por insolvencias, como es el caso del complejo turístico de lujo más importante del país, valorado en unos 75 millones de euros, cuyo propietario era el expresidente de la Federación de Fútbol

La economía, peor de lo previsto

La economía de Turquía, además, está evolucionando peor de lo esperado, a pesar de las medidas adoptadas por el Ejecutivo de Erdogan, como la subida drástica de los tipos de interés para taponar el hundimiento de la lira.

Esta circunstancia se está teniendo en cuenta por los analistas, que está revisando a la baja las perspectivas de beneficio del banco español en el país euroasiático, que en 2017 aportó el 18% de los ingresos y el 12% de las ganancias.

Para 2019, el consenso de las catorce casas que el propio BBVA toma como referencia indica que la aportación del mercado turco apenas alcanzará los 232 millones de euros, una cifra dos veces inferior a lo proyectado antes de este verano. En la predicción anterior, de septiembre, la contribución para el próximo ejercicio era de 343 millones. En junio, alcanzaba los 741 millones.

No se observa una mejoría sustancial en ninguna de las otras regiones donde opera, como España, México o Estados Unidos

Para 2020 la previsión de beneficios de Garanti y el resto de actividades que realiza el grupo español en Turquía se limitará a 280 millones, frente a los 410 millones de después del crash estival y de los 774 millones de primavera.

Con estas estimaciones, el beneficio del grupo se resentirá prácticamente en la misma proporción, ya que no se observa una mejoría sustancial en ninguna de las otras regiones donde opera, como España, México o Estados Unidos. Se prevé que en 2019, las ganancias de BBVA alcancen los 4.637 millones, un 14% menos que las cuentas que presente este año. Hay que tener en cuenta que en 2018 el resultado se verá aumentado por las plusvalías cosechadas por la venta de la filial chilena, que ascienden a 640 millones. Sin este efecto, la caída será del 2,4%.

BBVA confía en la recuperación de Turquía, de donde procede el que será nuevo consejero delegado, Onur Genç. Lleva invertidos 7.000 millones en Garanti, que controla con casi un 50% del capital. Debido a la crisis, acumula unas minusvalías latentes superiores a los 5.000 millones.